¿CUALES SON LAS POLÍTICAS QUE LOS PAÍSES Y COMUNIDADES DEBEN UTILIZAR PARA MEJORAR EL INCREMENTO DE LA ACTIVIDAD FÍSICA?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
La actividad física se retoma desde la promoción
de la salud a través de la intervención de
profesionales en esta área, instituciones
sanitarias y educativas como un medio intercesor
fundamental que contribuye en la obtención de
resultados significativos en pro de la evolución y
mejoramiento de la calidad de vida (1).
La Organización Mundial de la Salud la considera
como el factor que interviene en el estado de la
salud de las personas, y la define como la principal
estrategia en la prevención de la obesidad
entendiéndola como “cualquier movimiento
corporal producido por los músculos esqueléticos
y que produce un gasto energético por encima de
la tasa de metabolismo basal. Incluye actividades
de rutina diaria, como las tareas del hogar y
del trabajo”. También involucra dentro de este
concepto actividades que requieren de algún grado
de esfuerzo como, por ejemplo, lavarse los dientes,
trasladarse de un lugar a otro para satisfacer las
necesidades, limpiar la casa, lavar el carro, realizar
un deporte de alto rendimiento y muchas otras más
que el ser humano realiza diariamente (1).
La Organización Panamericana de la Salud en
su estrategia mundial sobre régimen alimentario,
actividad física y salud afirma que la actividad
física se vincula al concepto de salud y calidad de
vida como una estrategia o intervención efectiva
que permite mejorar la autopercepción, el nivel
de satisfacción de las necesidades individuales y
colectivas y los beneficios reconocidos que esta
trae desde lo biológico, psicosocial y cognitivo,
además de ser un factor de protección para prevenir,
en general, la instauración de enfermedades
crónicas (17).
La Asociación de Medicina Deportiva de
Colombia (AMEDCO) conceptualiza la actividad
física como cualquier movimiento corporal
voluntario de contracción muscular, con gasto
energético mayor al de reposo; además, esta
actividad es entendida como un comportamiento
humano complejo, voluntario y autónomo, con
componentes y determinantes de orden biológico
y psico-sociocultural, que produce un conjunto de
beneficios de la salud, ejemplificada por deportes,
ejercicios físicos, bailes y determinadas actividades
de recreación y actividades cotidianas, las cuales
se consideran como un derecho fundamental (2),
conceptualización que evidencia la integración
de elementos contextuales que en la actualidad se
consideran de gran importancia durante el abordaje
de la actividad física.
Otros autores la definen como “Cualquier
movimiento del cuerpo producido por el sistema
músculo esquelético y que tiene como resultado
un gasto energético. A este concepto enmarcado
en el ámbito biológico habría que sumarle las
características de experiencia personal y práctica
sociocultural. De esta forma la actividad física
tiene varias vertientes según la finalidad laboral
o doméstica, de práctica de tiempo libre, como
de carácter lúdico recreativo, desde el ámbito
educativo; ninguna de las anteriores es excluyente
de la formación de las personas” (3).
La actividad física es un concepto que abarca
cualquier movimiento corporal realizado por
músculos esqueléticos que provocan un gasto de
energía, la cual se encuentra presente en todo lo que
una persona hace durante las 24 horas del día, salvo
dormir o reposar; por lo tanto, se pueden distinguir
las modalidades de: actividades necesarias para
el mantenimiento de la vida y actividades cuyo
objetivo es divertirse, relacionarse, mejorar la
salud o la forma física, y hasta competir (4).