Cuales son las a consecuencia de la bioetica
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
La ética que se preocupa sólo de las consecuencias es un mal generalizado: lo encontramos en el fin de la vida, en el que raramente nos preguntamos por qué un enfermo quiere morir, frente a mil pacientes en las mismas condiciones que en cambio quieren vivir. Así, en el campo de los estupefacientes: ¿cuántas páginas en los periódicos sobre la liberalización de las drogas y cuántas, en cambio, sobre las motivaciones que llevan a un chico de quince años a drogarse o a emborracharse solo en un bar? También en el campo de la fecundación in vitro se calla acerca de las causas eliminables y cada vez más en aumento de la esterilidad, mientras que se abren de par en par las puertas a técnicas de fecundación a menudo tardías.
Explicación:
La Bioética es una ciencia muy joven y que además interactúa con otras ciencias como la medicina, el derecho, la filosofía (en especial en sus ramas de antropología, metafísica y ética), la biología, la ecología y tantas más. De ahí que su aplicación en la vida cotidiana y en los casos concretos que requieren de una decisión Bioética es complejo.
Simplemente visto desde el punto de vista tecnológico, los avances que existen actualmente permiten muchas cosas que afectan a la vida y que aunque aparentemente representen un bien, desde un análisis profundo no lo son o al menos no son lo mejor.
Desde el punto de vista ético, es decir el juicio de lo que es bueno o no, en los últimos tiempos se han planteado algunos pensamientos filosóficos que suponen miradas distintas, especialmente del hombre, como especie y de la persona.
Estas diversas formas de mirar a la persona humana, también afectan a la Bioética y es por ello que existen algunas corrientes que afectan en las decisiones que se toman con respecto a la vida humana. Mencionaremos las más influyentes, para después, en un ejemplo examinar las diferencias de fondo.
Corriente sociobiologista: esta corriente parte de la idea de que todo evoluciona, por tanto los valores también. No existen normas absolutas. Es una ética relativista.
Corriente liberal: que promueve el que cada uno es dueño de sí mismo, de su propio cuerpo y por ende puede tomar la decisión que bien le plazca sobre su uso y destino, sin importar la consecuencia. La libertad es un absoluto, casi supremo para esta corriente.
Corriente utilitarista: que se fundamenta en el beneficio que cada persona aporta a la sociedad. No existe para esta forma de pensamiento un valor intrínseco de la persona, todo se juzga en función de la “utilidad” que representa.
Corriente ontológico-personalista: que reconoce que cada persona es única e irrepetible, con una dignidad que no se pierde jamás, mientras viva. Esa dignidad exige de un respeto especial que parte del propio derecho a la vida.
Pongamos el caso de una mujer de 40 años, casada con tres hijos. Su posición socioeconómica es de clase media. Ambos trabajan para sustentar su hogar y la educación de sus hijos que cuentan con 12, 8 y 3 años de edad.