cuales es el criterio que se utiliza para clasificar a los aparatos circulatorios en abiertos o cerrados
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
La gran mayoría de los organismos dependemos del aporte de oxígeno a nuestras células. Algunos de ellos, bien porque son muy pequeños (menos de 1 mm de diámetro [1]) o bien porque la mayoría de sus células se encuentra en contacto directo con el oxígeno, son capaces de obtenerlo simplemente por difusión. Pero si no se cumplen estas condiciones, es necesario que haya órganos respiratorios y, en la mayoría de los casos, un sistema circulatorio. Aunque este sistema realiza otras funciones (transmisión de calor, transporte de células, transmisión de fuerza...) la que determina la velocidad de la sangre, es la de transportar el oxígeno a través de un medio líquido a todas las células del organismo. Es necesario, por tanto, generar el movimiento de un fluido y para ello se necesita que haya diferencia de presiones entre distintos puntos. La sangre se moverá entonces desde zonas de mayor a menor presión. En este contexto, el corazón actúa como la bomba mecánica capaz de dotar a la sangre de alta presión. Y tanto los vertebrados como los invertebrados disponen de, al menos, un corazón capaz de generar una presión positiva. A la salida del corazón la sangre circula por el organismo, pero puede hacerlo a través de conductos cerrados a lo largo de todo el sistema (sistemas cerrados) o bien puede salir de los conductos y bañar los tejidos en algunos puntos del sistema (sistemas abiertos) [2-4].