¿Cuál ha sido el aporte de las bacterias a la investigación científica?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Siempre que oímos hablar de bacterias las relacionamos con enfermedades, pues a lo largo de la historia las bacterias han sido responsables de varias epidemias, una de ellas, la peste negra o bubónica causada por la bacteria Yersenia pestis fue responsable de que 200 millones de personas, un tercio de la población de Europa, pereciera entre el siglo VIII y el XIV (Figura 1).
Pero existen otras bacterias que ayudan a mantener la salud y prevenir enfermedades, bacterias benéficas, y de ellas escribimos en esta ocasión.
Bacterias benéficas
Los microorganismos benéficos tienen una larga historia especialmente las bacterias conocidas como probióticas. Se han encontrado referencias que muestran que desde la antigüedad se reconocían efectos benéficos producidos por estas bacterias, por ejemplo, en el viejo testamento (Génesis 18:8), se menciona que Abraham debió su longevidad al consumo de leche agria y en la antigua Roma en el año 76 d.C. Plinius (escritor y naturalista Romano), recomendaba la administración de productos de la fermentación láctea para tratar enfermedades gastroentéricas (Figura 2).
Así, las bacterias benéficas han existido y coevolucionado a lo largo de la historia de la humanidad aportando beneficios a la salud de los hospederos en los que habitan.
Las bacterias benéficas son principalmente de los géneros Lactobacillus y Bifidobacterium (Figura 3), y se caracterizan por brindar beneficios a sus hospederos al crear un microbioma (ambiente microscópico a nivel intestinal) favorable para su desarrollo y limitante para el desarrollo de bacterias patógenas como Escherichia coli y Salmonella spp., que son responsables de provocar enfermedad diarreica aguda.
Explicación: