¿Cual fue la relación de los obreros con Juan Domingo Peron? ¿ Que derechos se conquistaron con Peron en el poder?. En Argentina.
Respuestas a la pregunta
La habilidad de un personaje para manejar la coyuntura internacional y nacional, explotando para sus intereses las debilidades del sistema tradicional, así como las fortalezas potenciales de un sector importante de la sociedad argentina como fue la de los trabajadores, en el contexto económico y político internacional de la Segunda Guerra Mundial así como de la Guerra fría, le da a Perón el título del presidente de la clase trabajadora argentina, pues vemos cómo durante su gestión como actor político, asentó la alianza entre el Estado y los obreros, haciendo ingresar a los últimos a la vida política y social de una Argentina que hasta 1943 mantenía, en forma y en fondo, las diferencias y estratificaciones sociales muy acentuadas. Impulsó la agremiación, la industrialización, mejoró las condiciones sociales de los trabajadores.
El populismo peyorativo con que se etiqueta la gestión peronista de Juan Domingo Perón, tiene sus fundamentos, pues es durante su administración que las cajas fiscales empiezan a vaciarse mientras el ritual casi religioso a su figura se va incrementando; pero también tiene el lado positivo de haber sido el primer gobierno que logró adherir al Estado a sectores sociales laborales históricamente marginados y contenidos en una situación no feudal, pero sí de “servidumbre” laboral, donde sus derechos y bienestar no eran la norma del día a día. Estos grupos lograron adquirir su vida política a través de las manifestaciones públicas – y apoyadas por Perón – de reclamo de mejores condiciones de vida. Este apoyo se revirtió hacia Perón, consolidándolo en el poder y permitiéndole un gran margen de independencia de otras fuerzas como la militar, al menos hasta 1955.Los beneficios llegaban por lealtad más que por derecho y esa inestabilidad propia de los gobiernos populistas – ese no cambiar realmente las estructuras sociales – fue lo que antecedió a su caída.
Finalmente es preciso acotar que Argentina tuvo que enfrentar la consolidación de un Estado-Nación moderno, el crecimiento urbano de centros de producción y la emergencia de una clase trabajadora que tenía que ser organizada con la finalidad que no desborde al Estado. Es dentro de ese marco de acontecimientos que Perón aparece como el líder populista – carismático, orador, “simpático” y entrador – gobernando con un estilo casi fascista a la sociedad argentina, pero manejando el vehículo político a través del cual se ingresó a la política de masas.