Historia, pregunta formulada por arayg50, hace 4 meses

Cuál fue la acción política de Trosky?​

Respuestas a la pregunta

Contestado por evegar93
1

Respuesta:

En 1917 Alexander Berkman y Emma Goldman, dos de las figuras más visibles del

anarquismo estadounidense, fueron encarcelados por su activismo contra el reclutamiento

forzoso en vista de la entrada del país en la Gran Guerra. Dos años más tarde, tras salir de

prisión y por orden de J. Edgar Hoover, encargado de la Oficina de Investigaciones del

Departamento de Justicia, fueron deportados a Rusia, su país natal, que se encontraba en

plena efervescencia revolucionaria. A pesar del entusiasmo que les provocó desde su origen

la revolución que encabezaban los bolcheviques, a la que se habían unido como voluntarios

numerosos anarquistas procedentes del país americano, lo que encontraron a su llegada les

preocupó. Muchos dirigentes del movimiento anarquista, que habían jugado un papel

crucial en el triunfo revolucionario, eran entonces discriminados, se les asignaban

habitaciones pobres, se les daba un racionamiento miserable, eran enviados a trabajar a

sitios remotos y, en numerosos casos se les encarcelaba. Emma Goldman y Alexander

Berkman se entrevistaron con Lenin, a quien entregaron un memorandum con detalles

acerca de lo que consideraban “notables contradicciones de la vida sovietica”. Lenin se

mostró más interesado por las condiciones laborales en los Estados Unidos, el movimientoobrero y la IWW y lamentó que no hubieran podido quedarse en los Estados Unidos donde

podrían haber hecho tanto para promover el advenimiento de la revolución1

.

Entre quienes alertaron, muy pronto, acerca de los peligros que significaba la creación de

un Estado proletario, estaba el príncipe Piotr Kropotkin, quien había regresado a Rusia a

mediados de 1917, abandonando su largo exilio londinense, entusiasmado por el proceso

revolucionario del que se desencantó muy pronto. Tuvo debates y enfrentamientos con

Lenin y la plana mayor de los bolcheviques, defendiendo las libertades individuales, tan

caras al movimiento libertario, así como el sistema de cooperativas, y criticando los

métodos coercitivos, la persecución de anarquistas y la nueva burocracia proletaria2

.

La muerte de Kropotkin, el 8 de febrero de 1921, suscitó el último acto multitudinario del

movimiento anarquista, por lo menos el último antes de la Revolución española de 1936.

Más de cien mil personas asistieron a su funeral en Moscú para el que las autoridades

bolcheviques aceptaron dejar en libertad provisional a siete de los muchos anarquistas

presos en las cárceles de la Cheka. Fueron ellos quien cargaron el ataúd en medio de una

impresionante asamblea silenciosa que ondeaba las banderas rojas y negras de las

organizaciones ácratas. En el cementerio Devichy, Goldman y Berkman pronunciaron

discursos de despedida a su correligionario y maestro3

.

Un mes después, en marzo, ocurrió la violenta represión de los marinos de Kronstadt,

quienes se habían sumado a la huelga masiva de trabajadores de Petrogrado agobiados por

el hambre y el frío, añadiendo a las exigencias de los huelguistas la necesaria

democratización del Estado soviético. Lenin y Trotsky actuaron contra los huelguistas

acusándolos de “conspiración contrarrevolucionaria contra la república proletaria”. Del 7 al

17 de marzo de 1921 miles de marinos y soldados fueron muertos. Emma Goldman y

Alexander Berkman habían enviado una carta a Zinoviev, intentando mediar en el conflicto.

Tras la represión empezaron a considerar seriamente su salida de la Rusia soviética4

. El

sueño formidable de la revolución proletaria se esfumaba.

Después de Kronstadt, la relación con los bolcheviques se hizo imposible para los

anarquistas. Alrededor del 90 por ciento de los que habían llegado de los Estados Unidos

encontraron la muerte en las cárceles rusas o a manos de la Cheka. Los intelectuales del

movimiento, Volin, Alexander Schapiro, Emma Goldman y Alexander Berkman fueron

deportados fuera de Rusia a finales de 19215

. Un largo peregrinaje político los llevaría a un

periplo por Letonia, Suecia, Alemania, Francia y en el caso de Emma, Inglaterra. Emma

diría que se encontraban “nowhere at home”. Ningún sitio era su hogar. El mismo

sentimiento embargaría, una década más tarde a León Trotsky quien inició su propio

recorrido de exiliado en la isla turca de Büyük Ada. “La provisionalidad con que se

acomodaron en aquel refugio”, dice Leonardo Padura, “se advertía en la ausencia de

objetos destinados a embellecerlo; ni siquiera había un simple rosal en el jardín: “Plantar

Explicación:


royfra8991: wey como le hiciste para escribir todo eso
arayg50: nesecito el de trostky
evegar93: es de el
arayg50: ah gracias
evegar93: de nada
Otras preguntas