Cual es la relación que puedes hacer entre politica y fútbol
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
El fútbol y la política pueden ser perfectos opuestos: mientras que la política es un mecanismo para conciliar conflictos verdaderos, el fútbol consiste precisamente en crear conflictos falsos y mantenerlos a perpetuidad. Por eso la política importa y debe tomarse en serio, mientras que el fútbol es intrascendente y debe tomarse más en serio aún.
Si el fútbol tiene algún valor es precisamente porque carece de sentido. Como lo expresa Chad Harbach, «lo adorabas porque lo considerabas un arte: una actividad en apariencia sin sentido, llevada a cabo por personas con aptitudes especiales, una actividad que escapaba a todo intento de quienes pretendían definir su valor y sin embargo, de algún modo, parecía transmitir algo verdadero o incluso fundamental sobre la condición humana. Y la condición humana consistía, básicamente, en el hecho de que estamos vivos y tenemos acceso a la belleza, hasta podemos crearla aquí y allá, pero algún día estaremos muertos y ya no lo tendremos».
No hay ningún buen motivo para unirlo a la política, y sin embargo, lo cierto es que nuestra ideología o el partido al que votamos pueden relacionarse con el equipo por el que tenemos simpatías. El vínculo tiene poco de determinista y mucho de circunstancial, pero existe. Este artículo analiza precisamente esa cuestión: cómo se entrelazan nuestras afinidades políticas y deportivas. Confirmaremos algunos mitos (como que el FC Barcelona es el favorito de los votantes de izquierdas), pero también encontraremos sorpresas (como que el Atlético es más popular entre las clases altas y el Real Madrid entre la clase obrera). Pero empecemos con una pregunta más sencilla: cuánto nos interesa el fútbol.
¿Cuánto nos interesa el fútbol?
Mucho. Sí, no son precisamente Breaking News. Pero gracias a una encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) podemos precisar y afirmar que el fútbol interesa al 48%. Es decir, a un montón de gente.