¿Cuál es la fuente de energía en los insectos?
Respuestas a la pregunta
El movimiento de los insectos también depende de las características físicas del hábitat donde habitan, así como del paisaje en el que se encuentra inmerso dicho hábitat, lo que puede facilitar o restringir el movimiento de los individuos. Por ejemplo, se sabe que algunas especies de mariposas no pueden salir del bosque conservado donde nacieron porque necesitan las condiciones de temperatura y humedad que brinda la cubierta forestal continua. Por otro lado, se sabe que otras especies no se limitan a un tipo de hábitat específico y son capaces de atravesar tanto entornos naturales como áreas ocupadas por actividades humanas, como cultivos y pastizales. Una de las características de los paisajes que facilita la movilidad de insectos y otros animales para llegar a diferentes lugares es la presencia de corredores biológicos, definidos como líneas de árboles que conectan ambientes similares, así como la avenida principal conecta el centro de la ciudad con otras colonias. En paisajes donde queda poco hábitat natural, algunas especies utilizan los corredores biológicos como la ruta más segura y quizás la única para viajar en busca de alimento o lugares de reproducción.
A través de los estudios del movimiento de los organismos, los biólogos pueden aprender cómo utilizan el paisaje. Un ejemplo de cómo dos especies de insectos siguen diferentes estrategias de movimiento en el paisaje se puede encontrar en el bosque nuboso de montaña cerca de la ciudad de Xalapa. En este ecosistema viven dos especies de escarabajos que se alimentan de excrementos de vertebrados: Deltochilum mexicanum y Dichotomius satanas. La primera especie reside y se desplaza preferentemente dentro de los remanentes del bosque y utiliza los corredores de vegetación para desplazarse por el paisaje. Al permanecer dentro del bosque, los machos y hembras de Deltochilum mexicanum aumentan la probabilidad de encontrarse y aparearse, por lo que sus poblaciones pueden llegar a ser grandes. Sin embargo, sus actividades están limitadas por la extensión de las áreas forestales. Por lo tanto, ante un cambio drástico en el medio ambiente, como la quema o tala de árboles, esta especie podría verse gravemente afectada. En cambio, la segunda especie, Dichotomius satanas, se desplaza por el paisaje y puede atravesar plantaciones y pastizales para llegar a otros fragmentos de bosque. Moverse usando diferentes entornos reduce la competencia por el alimento y le permite llegar a nuevos territorios. Sin embargo, esto puede ser peligroso para la supervivencia de los individuos, ya que pueden encontrarse con depredadores potenciales.