Cual es la célula de la inmunidad innata que no esta en la circulación?
PD: Si responden tonterías les cae reporte :v
Respuestas a la pregunta
La inmunidad innata (natural) se denomina así porque es congénita y no necesita del aprendizaje que se obtiene tras entrar en contacto con un invasor. Por lo tanto, proporciona una respuesta inmediata a los invasores. Sin embargo, los componentes de este tipo de inmunidad tratan a todos los invasores de la misma forma.
Los glóbulos blancos que intervienen en la inmunidad innata son
Monocitos
Neutrófilos
Eosinófilos
Basófilos
Células NK (linfocitos citolíticos naturales)
Cada clase tiene una función distinta.
Otros participantes que intervienen en la inmunidad innata son
Mastocitos
Sistema del complemento
Citocinas
Monocitos y macrófagos
Cuando aparece una infección, los monocitos se desplazan hacia los tejidos. Allí, en un periodo de unas 8 horas, los monocitos aumentan de tamaño considerablemente y producen gránulos en su interior, tras lo que se convierten en macrófagos. Los gránulos están llenos de enzimas y de otras sustancias que ayudan a destruir y a digerir las bacterias y otras células extrañas.
Los macrófagos segregan sustancias que atraen a otros glóbulos blancos al lugar de la infección. Los macrófagos también ayudan a los linfocitos T a reconocer a los invasores y, por lo tanto, también participan en la inmunidad adquirida.
Los neutrófilos circulan en el torrente sanguíneo y deben recibir señales para salir de él y entrar en los tejidos. A menudo, la señal proviene de las propias bacterias, de las proteínas del sistema del complemento o de los tejidos dañados, todos los cuales producen sustancias que atraen a los neutrófilos a la zona conflictiva. (El proceso por el que se utilizan sustancias para atraer a las células a una zona determinada se denomina quimiotaxia).
Los neutrófilos también liberan sustancias que forman fibras en el tejido circundante. Estas fibras atrapan bacterias, lo que evita que se diseminen y las hace más fáciles de destruir.
Los eosinófilos pueden ingerir bacterias, pero también atacan a células extrañas que son demasiado grandes para poder ingerirlas. Contienen gránulos que liberan enzimas y otras sustancias tóxicas cuando encuentran células extrañas. Estas sustancias perforan las membranas de las células atacadas.
Los eosinófilos circulan por el torrente sanguíneo, pero son menos activos contra las bacterias que los neutrófilos y los macrófagos. Una de sus funciones principales consiste en adherirse a los parásitos y facilitar así que queden inmovilizados y puedan ser destruidos.
Los eosinófilos ayudan a destruir las células cancerosas. También producen sustancias químicas implicadas en la inflamación y en las reacciones alérgicas. Cuando se padecen alergias, infecciones parasitarias o asma, el torrente sanguíneo presenta más eosinófilos que cuando no se sufren estos trastornos.
Los basófilos no ingieren células extrañas. Contienen gránulos llenos de histamina, una sustancia que participa en las reacciones alérgicas. Cuando los basófilos encuentran alérgenos (antígenos que causan reacciones alérgicas), liberan histamina. La histamina aumenta el aporte de sangre a los tejidos dañados, lo que da lugar a hinchazón e inflamación.
Los basófilos también producen sustancias que atraen a los neutrófilos y a los eosinófilos a la zona conflictiva.
Las células NK se suelen denominar células asesinas naturales porque están listas para destruir en cuanto se forman. Estos linfocitos reconocen las células infectadas o cancerosas, se adhieren a ellas, y después liberan enzimas y otras sustancias que dañan las membranas externas celulares de esas células. Son importantes en la defensa inicial frente a las infecciones víricas.
Los mastocitos están presentes en los tejidos. Su función se asemeja a la de los basófilos en la sangre. Cuando detectan un alergeno, liberan histamina, además de otras sustancias implicadas en las reacciones inflamatorias y alérgicas.
El sistema del complemento está compuesto por más de 30 proteínas que actúan en secuencia: una proteína activa a otra, que a su vez activa a otra y así sucesivamente como defensa frente a la infección. Esta secuencia se denomina cascada del complemento.
Las proteínas del complemento tienen varias funciones, tanto en la inmunidad adquirida como en la innata:
Ayudar a destruir las bacterias adhiriéndose a ellas y facilitando de ese modo su identificación e ingestión por parte de los neutrófilos y de los macrófagos
Atraer macrófagos y neutrófilos a la zona conflictiva
Neutralizar los virus
Ayudar a las células inmunitarias a recordar a invasores específicos
Promover la formación de anticuerpos
Aumentar la efectividad de los anticuerpos
Ayudar al organismo a eliminar las células muertas y los complejos inmunitarios, que constan de un anticuerpo adherido a un antígeno.
Las citocinas son las mensajeras del sistema inmunitario. La detección de un antígeno activa la producción de citocinas por los glóbulos blancos (leucocitos) y por otras células del sistema inmunitario.