Cuál es la causa de que estos seres mitológicos habiten en el mundo actual, según la novela? en el libro minutario en zapatillas
Respuestas a la pregunta
En la consolidación del pensamiento filosófico occidental y su modelo logocéntrico de ascendencia helénica, hoy predominante en los procesos de enseñanza-aprendizaje de escuelas, colegios y universidades, es imprescindible situar al mito griego como un antecedente de la racionalidad filosófica encargada de la legitimación de principios universalmente aceptados, el cual estuvo enfocado en reflejar el mundo del que emergió y de designar sus diversas realidades ontológicas.
El mito, término proveniente del griego mythos -pero apropiado por los latinos como fábula o leyenda- será entendido aquí como aquello que denota palabra, discurso, narración o relato. Su dotación de sentido estará enmarcada por su develación ante un modo de realidad histórico-cultural concreto. En otras palabras, el mito posibilita la interpretación de una realidad de forma comunitaria y no desde una forma solitaria del mundo. Es el espacio en el que se revela el tejido de la existencia y a su manera, desde la metis como elemento propio, se intenta explicar. Siguiendo esta idea, López (2005) afirma que
el mito en modo alguno es expresión de una racionalidad malograda, debilitada o en estado de inmadurez. Por el contrario, es una construcción intelectual distinta, de profunda riqueza, que tiende a mezclar los opuestos, a situarse provocativamente frente a las oposiciones, sin asumir contradicción alguna, y que contiene un enorme potencial de creatividad (p. 111).
En este sentido, el mito se caracteriza por ser un espacio en el que se manifiesta la posibilidad de fundamentar reivindicaciones de corte territorial, político, ético, filosófico, religioso, histórico, entre otros. Es una apuesta por la resignificación de una lógica de lo concreto y una herramienta que se convierte en historia a partir del reconocimiento constitutivo de su orden coherente, mas no de sus supuestos elementos desconexos (Lévi-Strauss, 2012). En otras palabras, el mito, concebido como expresión oral y racional de la realidad, es un mecanismo de trasmisión cultural, el cual posibilita una comprensión no lineal de los acontecimientos ocurridos dentro de una comunidad, y a su vez una lectura oscilante entre representaciones propias de fenómenos histórico-concretos y apropiaciones culturales diversas.
La racionalidad mítica propicia una visión del mundo semánticamente rica, mientras que la racionalidad filosófica proporciona una visión del mundo más precisa. Es decir que la tradición oral propuesta desde el mito responde, en el marco de una cultura determinada, a unas psicodinámicas distintas a las que se proponen desde una cultura de lo visto, lo escrito y universalizable, características de un pensamiento filosófico. En este sentido, Lévi-Strauss afirma que
esta es la razón por la que debemos ser concientes de que si intentamos leer el mito de la misma manera en la que leemos una novela o un artículo del diario, es decir, línea por línea, de izquierda a derecha, no podremos llegar a entenderlo, porque debemos aprehenderlo como una totalidad y descubrir que el significado básico del mito no está ligado a la secuencia de acontecimientos, sino más bien, si así puede decirse, de grupos de acontecimientos, aunque tales acontecimientos sucedan en distintos momentos de la historia (2012, p. 78).
En este sentido, el mito puede asumirse: primero, como una objetividad de la experiencia social del hombre; segundo, como aquello que se origina en la ambigüedad del lenguaje, y siguiendo esta lógica, por último, como aquel espacio en el que su conocimiento no es una simple imitación de los objetos, sino aquello que los construye y los crea. Es por esto que, retomando a Eliade (1986), Sevilla, Tovar y Arráez (2006) caracterizan al mito como el pensamiento o discurso encargado de revelar un conocimiento colectivo y unificador a partir de cinco particularidades, que deben tenerse en cuenta para el desarrollo del presente trabajo. Al respecto dicen:
Los mitos narran la historia de los actos fabulosos y ficticios de los dioses y héroes de un pasado remoto.
Los relatos sagrados (opuestos a lo profano), se consideran verdaderos, al encerrar cierto significado profundo e incluso gran cantidad de verdades filosóficas de origen divino que hay que descifrar pues se hallan ocultas y que solamente en un lenguaje sencillo podría interpretarse.