Cuál es el inicio desarrolló y final en la fábula
El perro fiel
Existió una vez un hombre que tenía un perro al que no paraba de maltratar, debido entre otras cosas a la pobreza que pasaba. El espíritu de los animales, kakasbal, hablo con el perro maltratado y le sugirió que que abandonase a su amo, ya que todos los días recibía muchas palizas. El animal se negó rotundo diciéndole que nunca escaparía porque él era un perro fiel, a pesar de que su dueño nunca se lo agradecería. El espíritu fue tan insistente que el perro le hizo creer que aceptaría su propuesta. Para ello, debía venderle su alma y el animal tendría un deseo. El can le pidió al espíritu un hueso por cada pelo, ante eso el espíritu se puso a contarlos hasta que el perro se acordó de su amo y se movió a propósito para que esté perdiera la cuenta. Tras el enfado del espíritu, el animal aseguro que fue por las pulgas. Este proceso lo repitió hasta cien veces, entonces kakasbal se dió cuenta de que el perro no quería venderle su alma. Por lo que le respondió al perro. Me has engañado, pero me has dado una lección, porque ahora se que cuesta mucho más comprar el alma de un animal que la de un ser humano.
Respuestas a la pregunta
Inicio: Existió una vez un hombre que tenía un perro al que no paraba de maltratar, debido entre otras cosas a la pobreza que pasaba
Desarrollo: El espíritu de los animales, kakasbal, hablo con el perro maltratado y le sugirió que que abandonase a su amo, ya que todos los días recibía muchas palizas. El animal se negó rotundo diciéndole que nunca escaparía porque él era un perro fiel, a pesar de que su dueño nunca se lo agradecería. El espíritu fue tan insistente que el perro le hizo creer que aceptaría su propuesta. Para ello, debía venderle su alma y el animal tendría un deseo. El can le pidió al espíritu un hueso por cada pelo, ante eso el espíritu se puso a contarlos hasta que el perro se acordó de su amo y se movió a propósito para que esté perdiera la cuenta. Tras el enfado del espíritu, el animal aseguro que fue por las pulgas. Este proceso lo repitió hasta cien veces, entonces kakasbal se dió cuenta de que el perro no quería venderle su alma.
Final: . Por lo que le respondió al perro. Me has engañado, pero me has dado una lección, porque ahora se que cuesta mucho más comprar el alma de un animal que la de un ser humano.
Respuesta:
no lo sé UU :( :(;%*%*$*%*%*%**%