Cuál es el asido nucleico del covid-19
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
El genoma de los coronavirus no está formado por ADN, como el de animales y plantas, sino que está compuesto por otro tipo de ácido nucleico: el ARN. Precisamente, esta característica define una de las propiedades más importantes de estos virus: su alta tasa de mutación.
Esto es debido a que las ARN-polimerasas, las proteínas que copian el genoma viral, no tienen capacidad de corrección de errores. Por este motivo, cada nueva generación viral va acumulando errores de copia y son, cada vez, menos parecidas a la cepa original.
La evolución del nuevo coronavirus
Esta acumulación de fallos es una ventaja adaptativa clave en la evolución de los virus ARN. El azar hace que algunos de los viriones “defectuosos” resulten más favorables para su actividad y peligrosos para su hospedador, por tener una mayor tasa de replicación. También pueden tener una mayor virulencia, un tropismo diferente, o una diferente especificidad a la hora de entrar en las células hospedadoras.
Cuando se produce una mutación que permite que un virus, previamente sólo capaz de infectar a un estrecho rango de hospedadores, pase a infectar otras especies, se produce el “salto de especie”. Este es el mecanismo por el que aparecen en la naturaleza nuevos virus patógenos para el ser humano. Según recientes estudios genómicos, el SARS-CoV-2 se habría originado en murciélagos y habría saltado a humanos mediante un paso previo a través de un hospedador intermediario. Se ha sugerido la hipótesis de que este hospedador intermediario podría ser el pangolín, pero estudios genómicos recientes indican que es probable que se trate de ciertas especies de tortugas (Liu, Z y cols; 2020).