cuadro signotico y su extructura correspondiente sobre la novela
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
No te puedo hacer un cuadro signotico pero si decir la estructura de la novela
Explicación:
Todas las historias tienen cuatro puntos en común: el entorno, la idea, el personaje y el evento
Si al escribir te das cuenta de que disfrutas descubriendo y describiendo ese mundo, entonces tu mejor opción es seguir por ese camino y estructurar tu novela sobre el entorno. La estructura es bastante sencilla: tu historia comienza cuando el personaje llega y terminará cuando se marche o, en su defecto, cuando decida que ese es lugar.
Estructura 2: La idea
Esta estructura se basa en la información que descubren los personajes mientras avanzan en la historia. Esta estructura también es sumamente simple: comenzará cuando se plantee la pregunta y terminará cuando esta obtenga respuesta.
Las historias de misterio, los thrillers y las novelas de detectives siguen esta estructura. La historia suele empezar con un crimen y la gran pregunta suele ser: ¿Quién lo hizo y por qué? La historia termina cuando se revela la identidad del culpable.
En la ficción especulativa —qué poquito me gusta el término—, suele funcionar muy bien este tipo de estructura: ¿Qué le pasó a esta civilización perdida en un planeta tan lejano? ¿Por qué se extinguieron? Si eran tan listos, ¿por qué están todos muertos? En Estrella Arthur C. Clarke lo solventa con un sol que se ha convertido en súpernova.
Si te decides por escribir una historia basada en una idea, recuerda que debes comenzar lo más cerca posible del momento en que surja la pregunta. De nuevo no quiero saber qué ha desayunado el personaje. Tampoco me cuentes sus años dorados de jubilación, termina en cuanto hayas contestado la pregunta.
Estructura 3: El personaje
Las historias basadas en un personaje narran su transformación personal. Pueden estar basadas en un personaje o en muchos, normalmente la historia trata sobre quién o qué es y su proceso de autodescubrimiento.
La estructura, en este caso es tan simple como el resto: la historia empezará cuando el personaje tiene un problema, en ese momento comenzará un proceso de cambio. La historia acaba cuando el personaje termina el proceso; bien cambiando para bien o para mal bien quedándose como estaba. Un ejemplo de esto último sería el personaje de Winston, en 1984
Estructura 4: El evento
Las historias basadas en un evento son sencillas de reconocer: el mundo está viviendo una época dorada, pero un «evento» repentino cambia el flujo natural de las cosas y amenaza con ejecutarlo todo. En El Señor de los Anillos es la aparición de un antiguo mal, en Añoranzas y Pesares es la muerte de un rey bueno, en It sería el regreso del mal sin forma, en Dune el nacimiento de un niño especial y en Hamlet el homicidio de un rey.