cronica sobre la cuarentena
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
POR JOSÉ LUIS PIEDRA. Por fin vemos algo de luz al final del túnel en esta larga pesadilla y la esperanza de doblegar al virus parece abrirse paso, o al menos controlarlo que ya es mucho. Todo un aliento motivacional después del hastío de más de un mes y medio de encierro hogareño.
En esta larga reclusión me he acordado mucho de aquella película de los años 90 'Atrapado en el tiempo', en la que el actor Bill Murray vivía de forma permanente en el tradicional día de la marmota en Estados Unidos. Y es que algo similar he experimentado en muchos de estos días donde el hartazgo de la rutina causaba estragos al haber reducido la inevitable cotidianidad vital al hábitat de mi casa. Nunca el tiempo había impuesto su rígida tiranía con una aplastante monotonía ante la que me ha sido imposible oponer resistencia al ser imposible escapar de los límites físicos de mi casa, excepto para las compras indispensables como todo el mundo. Y todo ello inundado a diario por el seguimiento informativo de la crisis sanitaria, tal vez excesivo y que ha llegado convertirse en una obsesión.
La condena de repetir siempre el mismo día y siempre con el mismo tema, el coronavirus, como en la película de Bill Murray, la marmota convertida en la maldición de una crisis sanitaria cuyas magnitudes nadie esperaba y que nos recuerda que lo más importante de la vida es la vida misma, ésa que han perdido desgraciadamente miles de personas a causa de este diabólico virus. Con esta perspectiva, la insoportable rutina se torna incluso en sublime y terminas abrazando la bendita cotidianidad como la gran virtud que te confiere la vida. Máxime cuando tienes la fortuna de afrontar el confinamiento acompañado del mayor tesoro que ésta te ha regalado, mis dos hijos, una preadolescente de 14 y otro aprendiz de adulto con 18.
No hay mal que por bien no venga y con ellos en este tiempo hemos reforzado nuestra particular piña familiar y mejorado nuestra convivencia, no exenta de conflictos inevitables con tanto tiempo juntos. También he visto una mejora en la responsabilidad compartida en el desempeño de las tareas del hogar, donde se han implicado mucho más que antes. Creo que este encierro ha servido para acelerar en su madurez y hasta en mis conversaciones con ellos he sentido en ocasiones que parecía estar hablando con adultos, especialmente cuando nos referíamos a la cruda realidad que nos está dibujando la pandemia.
Nuestra gran preocupación todos los días era, sin duda, mi madre y abuela de mis niños, que a sus 90 años sigue aferrada a la vida con una vitalidad encomiable en una residencia de mayores. Los estragos dramáticos que el coronavirus está causando en estos centros hacía crecer nuestro miedo, alimentado a diario por las incesantes y luctuosas noticias que llegaban de esto centros.
Explicación: es copiado haci que no me digan nada malo ;c
Respuesta:
A FINALES DE 2020 Por fin vI algo de luz al final del túnel en esta larga pesadilla y la esperanza de ABATIR al virus , o al menos controlarlo que ya es mucho. Todo un aliento motivacional después del CANSANCIO de más de unOS MESES de encierro...el ESTRES de la rutina REPETIDA causaba DESASTRE al haber reducido la inevitable cotidianidad DE TODOS LOS DIAS EN mi casa. Nunca el tiempo había SIDO TANTO PARA MI DEL ESTAR EN MI CASA TODO EL DIA, PERO SE PODIA SALIR PARA las compras , como todo el mundo LO ASIA...LO DE SIEMPRE ERA repetir el mismo día y siempre con el mismo tema, el coronavirus, PERO AL FINAL DE TODO ENCONTRARON LA CURA PARA AFRONTAR ESTA ENFERMEDAD Y SE ESTA NORMALIZANDO LENTAMENTE
Explicación: