Historia, pregunta formulada por felipegh109, hace 9 meses

cronica de la revolución mexicana me ayudan plox

Respuestas a la pregunta

Contestado por LilaWolfGirl
8

Respuesta:La Revolución Mexicana. Crónicas, documentos, planes y testimonios. estudio introductorio, selección y notas de Javier Garciadiego, México: Universidad Nacional Autónoma de México, Coordinación de Humanidades, 2003. 408p. Biblioteca del Estudiante Universitario, 138,

Explicación:

La introducción avanza cronológicamente, respetando los clásicos recortes temporales, sobre los cuales no puede haber mayor originalidad: las postrimerías del Porfiriato, el maderismo, el golpe de Estado de Huerta, la guerra civil, la derrota del ejército federal, la lucha de facciones, el gobierno La Revolución estalla entonces por una sobrecarga de reclamos políticos que el Antiguo Régimen ya no puede contener. La lucha armada aparece como el último recurso, y no precisamente como el más deseado por el maderismo. El ejercicio de los derechos ciudadanos es la bandera de este último, sin que haya más que someras referencias a la "cuestión social". Sin embargo, la guerra contra el ejército federal destrabó mecanismos de participación donde las demandas populares encontraron canales de expresión. Garciadiego sostiene que sólo, y cuando la política de oposición asumió la forma de rebelión armada, se abrieron las compuertas de la participación popular, convirtiendo a la Revolución en un proceso "multirregional y multiclasista". Fue en ese momento cuando se desbordaron las limitadas demandas de las clases medias urbanas y el reclamo social se hizo presente en un país convulsionado por la guerra.

Si la dimensión política constituye el eje rector de la propuesta, el hecho militar se recupera como parte consustancial de esa dimensión. Más allá de lo "anecdótico" de campañas militares y batallas, que por cierto aparecen claramente reseñadas, lo verdaderamente significativo es el rescate de una esfera descuidada en la propia historiografía política de la Revolución, esto es, entender que las facciones, ya sean zapatistas, villistas o constitucionalistas, se expresaban políticamente a través de las armas. La naturaleza de las demandas, el surgimiento y la consolidación de liderazgos, así como los mecanismos que asumía la representación política estuvieron signados por la lógica de la guerra. Esto es lo que presenta Garciadiego, traduciéndolo en una herramienta analítica que dota de inteligibilidad a ese mosaico de líderes, caudillos, planes y programas que respondían a realidades regionales y locales muy específicas.

Se ha dicho que, a diferencia de otras revoluciones en el siglo XX, la originalidad de la mexicana fue que primero se hizo y luego se pensó. La imagen es exagerada, pero no hay duda de que la Revolución fue pensada al calor de la guerra. Esa flexibilidad para ampliar el arco de alianzas, sobre la base de profundizar o radicalizar bases programáticas, encontró su mejor exponente en el carrancismo que a la postre se alzó con el triunfo que, sin embargo, no fue definitivo a juzgar por los sucesos de Tlaxcalantongo en 1920. Garciadiego cierra su ensayo en este año, no sin antes explicar, por un lado, la dinámica que hizo posible que el carrancismo superara miradas locales o regionales, para terminar desplegando un proyecto a escala nacional; y por otro lado expone los límites políticos de ese proyecto, producto de una Revolución que terminó entronizando a aquellos que la hicieron en los campos de batalla. Los señores de la guerra se creyeron con el derecho de encabezar un nuevo régimen, y así lo hicieron para, desde entonces, comenzar a tejer un nuevo soporte institucional, fundado en una legitimidad de raíz obrera y campesina, que cambiaría de una vez y para siempre el rostro de México.


felipegh109: Graciasssss
LilaWolfGirl: Si denada
LilaWolfGirl: Espero que te ayude
Otras preguntas