Criaturas marinas nocturnas que se alimentan por la noche
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Criaturas nocturnas 02
Larva de galera o "mantis marina".
FOTOGRAFÍA DE DAVID DOUBILET Y JENNIFER HAYES
Al caer la noche en alta mar, cuando el zooplancton asciende desde las profundidades para alimentarse, hay todo un mundo por explorar. Muchos de estos organismos son larvas, como la galera de la foto de arriba. Las galeras (o mantis marinas) son depredadoras voraces en sus fases de larvas y adultas, y el buceo nocturno ofrece la oportunidad de observarlas en las primeras etapas de vida. «Es la guardería del mar», dice el fotógrafo David Doubilet.
Criaturas nocturnas 03
Medusa y larva de pez león.
FOTOGRAFÍA DE DAVID DOUBILET Y JENNIFER HAYES
Con la ayuda de luces, los fotógrafos se sumergen en las profundidades del mar en plena noche para avistar animales como esta medusa (izq.), que se mueve como una cortina al viento, o esta larva de pez león (dcha.) rodeada de anfípodos, unos crustáceos diminutos.
Doubilet y la fotógrafa Jennifer Hayes comparan nadar en el mar por la noche con flotar en el espacio. «La única forma de saber qué es arriba y qué abajo es ver en qué dirección van las burbujas», dice Doubilet.
Criaturas nocturnas 04
Medusa inmortal.
FOTOGRAFÍA DE DAVID DOUBILET Y JENNIFER HAYES
Algunos avistamientos son menos comunes que otros, como el de esta medusa inmortal que Hayes fotografió en Anilao, Filipinas. Cuando se ve amenazado, este invertebrado brillante puede retroceder a la fase de desarrollo inicial, lo que básicamente es como reiniciar su vida. Es uno de los varios animales considerados el «santo grial» en el buceo nocturno. El animal que encabeza la lista de Doubilet y Hayes es el esquivo pulpo manta.
Criaturas nocturnas 05
Salpas.
FOTOGRAFÍA DE DAVID DOUBILET Y JENNIFER HAYES
Doubilet y Hayes utilizaron objetivos macro para inmortalizar a organismos diminutos como las salpas, unos invertebrados gelatinosos cuya longitud oscila de la uña de un pulgar a los 30 metros. Las salpas pueden unirse y formar cadenas luminiscentes, y utilizan señales eléctricas para reconocer sus movimientos. «Se retuercen y forman patrones geométricos y después cambian ante tus ojos», cuenta Hayes.
Criaturas nocturnas 06
Larva de carángido y medusa común.
FOTOGRAFÍA DE DAVID DOUBILET Y JENNIFER HAYES
Para viajar sanos y salvos de noche, algunos animales establecen alianzas inesperadas, como esta larva de carángido que se desplaza sobre la espalda de una medusa común. La seguridad también es una prioridad de los humanos, que están a merced de la corriente. Los buceadores echan una cuerda con luces en el mar, fijada a una boya en la superficie. Tanto los buceadores como su barco se orientan hacia la luz para no perderse.
Criaturas nocturnas 07
Pez volador.
Explicación:
Mariposa marina y pez vaca juvenil. la noche otorga a los fotógrafos la oportunidad de inmortalizar una gran diversidad de seres vivos. A la izquierda vemos una mariposa marina (Thecosomata), un caracol nadador que puede ser tan diminuto como un grano de arena y cuyo pie se ha convertido en lóbulos similares a alas que mueve para desplazarse por el agua. A la derecha, un pez vaca juvenil se ve atraído por la luz del fotógrafo. Criaturas nocturnas 09 Calamar
Respuesta:
Me dan corona pleaseeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee
Explicación:
Criaturas nocturnas 02
Larva de galera o "mantis marina".
FOTOGRAFÍA DE DAVID DOUBILET Y JENNIFER HAYES
Al caer la noche en alta mar, cuando el zooplancton asciende desde las profundidades para alimentarse, hay todo un mundo por explorar. Muchos de estos organismos son larvas, como la galera de la foto de arriba. Las galeras (o mantis marinas) son depredadoras voraces en sus fases de larvas y adultas, y el buceo nocturno ofrece la oportunidad de observarlas en las primeras etapas de vida. «Es la guardería del mar», dice el fotógrafo David Doubilet.
Criaturas nocturnas 03
Medusa y larva de pez león.
FOTOGRAFÍA DE DAVID DOUBILET Y JENNIFER HAYES
Con la ayuda de luces, los fotógrafos se sumergen en las profundidades del mar en plena noche para avistar animales como esta medusa (izq.), que se mueve como una cortina al viento, o esta larva de pez león (dcha.) rodeada de anfípodos, unos crustáceos diminutos.
Doubilet y la fotógrafa Jennifer Hayes comparan nadar en el mar por la noche con flotar en el espacio. «La única forma de saber qué es arriba y qué abajo es ver en qué dirección van las burbujas», dice Doubilet.
Criaturas nocturnas 04
Medusa inmortal.
FOTOGRAFÍA DE DAVID DOUBILET Y JENNIFER HAYES
Algunos avistamientos son menos comunes que otros, como el de esta medusa inmortal que Hayes fotografió en Anilao, Filipinas. Cuando se ve amenazado, este invertebrado brillante puede retroceder a la fase de desarrollo inicial, lo que básicamente es como reiniciar su vida. Es uno de los varios animales considerados el «santo grial» en el buceo nocturno. El animal que encabeza la lista de Doubilet y Hayes es el esquivo pulpo manta.
Criaturas nocturnas 05
Salpas.
FOTOGRAFÍA DE DAVID DOUBILET Y JENNIFER HAYES
Doubilet y Hayes utilizaron objetivos macro para inmortalizar a organismos diminutos como las salpas, unos invertebrados gelatinosos cuya longitud oscila de la uña de un pulgar a los 30 metros. Las salpas pueden unirse y formar cadenas luminiscentes, y utilizan señales eléctricas para reconocer sus movimientos. «Se retuercen y forman patrones geométricos y después cambian ante tus ojos», cuenta Hayes.
Criaturas nocturnas 06
Larva de carángido y medusa común.
FOTOGRAFÍA DE DAVID DOUBILET Y JENNIFER HAYES
Para viajar sanos y salvos de noche, algunos animales establecen alianzas inesperadas, como esta larva de carángido que se desplaza sobre la espalda de una medusa común. La seguridad también es una prioridad de los humanos, que están a merced de la corriente. Los buceadores echan una cuerda con luces en el mar, fijada a una boya en la superficie. Tanto los buceadores como su barco se orientan hacia la luz para no perderse.
Criaturas nocturnas 07
Pez volador.
«En una noche tranquila, la parte inferior de la superficie del mar es como un espejo», explica Hayes. En esta fotografía sacada por Doubilet, un colorido pez volador nada bajo la superficie del mar de los Sargazos, en las Bermudas. Estos peces pueden planear grandes distancias sobre la superficie extendiendo sus aletas pectorales como si fueran alas.