¿Crees que el arte sirve para algo?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Claro que si :^
Explicación:
El arte, una de esas capacidades intrínsecas de la condición humana que habita entre nosotros, casi con la misma naturalidad que el lenguaje… aunque de un tiempo acá tengo la impresión de que se nos está alejando, o mejor dicho, está saliendo de nuestra cotidianidad.
También es verdad que en otrora tampoco ha vivido el arte en todo momento cerca a los hombres, pero de alguna forma siento que las sociedades más desarrolladas viven actualmente inmersas en un mundo de vorágine desechable, y en las sociedades más empobrecidas se lucha por cubrir las necesidades básicas, y ambas, condenan al hombre a un estado de automatismo que le embrutece y le desconecta de su ser.
El arte, en cambio, es la vía contraria. Es el encuentro del hombre con su alma, es la admiración natural por la belleza que hace triunfar el espíritu frente a lo racional.
Curiosamente, el arte nace vinculado al mundo mágico-religioso. Las primeras estatuillas hechas en barro, las primeras pinturas rupestres aparecidas en cuevas remotas, demuestran ese intento del hombre primitivo en acercarse al mundo espiritual por medio de representaciones artísticas, como si de alguna forma esas figuras llamaran a los espíritus a habitar allí.
Así, el arte fue el lugar donde habitaron los espíritus. Religión y arte se convierten desde el inicio de la civilización en dos puertas que abrían el mismo espacio.
Muy pronto nacería el arte como expresión de “lo bello”, surgiendo una representación de ideales estéticos que han nutrido la imaginación e inspiración de los hombres durante todos estos siglos.
Hasta el día de hoy, cuando quiero expresar mi concepto de belleza recurro a la colosal escultura de La Victoria de Samotracia, que yace en el Museo del Louvre en París, realizada por un escultor anónimo hace más de dos mil años.
Pero el arte no había llegado a su límite. Más adelante, cumplió una función de transmisión del pensamiento (social, político, religioso). A través del arte se aprendieron los evangelios, se exaltaron los triunfos militares y se conmemoran a miles de figuras históricas.
No sería hasta el siglo pasado cuando el hombre descubriera la capacidad del arte en adentrarse en el mundo de las emociones del subconsciente. Hasta el día de hoy no hay mejor forma de plasmar un sueño, la sensación de satisfacción que produce un atardecer en la playa, la crudeza de la muerte, que por medio de la obra artística.
Dice la escritora experta en Arte Carmen Reviriegoei “El arte, cuando es bueno, te sacude, te conmueve, te emociona, te lleva de viaje a lo más profundo y más humano que hay en uno mismo”.
Quizás debamos volver la mirada hacia el arte, rescatar su sentido, encontrar el espacio en donde dejamos de cautivarnos por la capacidad del hombre en dibujar su alma.