cosas tipicas en Francia
ejemplo si no entienden la pregunta es como en Noruega los molinos
no respondan a lo tonto
es para mañana
Respuestas a la pregunta
Relaciones políticas
Las relaciones políticas entre Francia y Noruega se dinamizaron en la década de 1990 por la voluntad de las autoridades de Oslo de mantener el anclaje de Noruega en Europa.
La energía y el clima están en el centro de las relaciones bilaterales. En efecto, Noruega es el primer proveedor de gas a Francia (entre el 38% y el 40% del aprovisionamiento en 2015) y uno de los proveedores principales de petróleo a Francia (detrás de Rusia). Las empresas francesas están implantadas con fuerza en el sector de los hidrocarburos en Noruega: con 103 licencias, Total es el 2º productor de hidrocarburos en Noruega detrás de la empresa pública nacional Statoil; GDF Suez es el 2º comprador de gas noruego y cuenta, por su parte, con 38 licencias de exploración y producción. Se creó un diálogo anual sobre energía y clima por iniciativa de los dos ministros de Asuntos Exteriores; el 8 de marzo de 2013 se celebraron en París las 7as consultas sobre energía; el 4 de marzo de 2015 se celebraron en París las 3as consultas sobre el clima. Por otra parte, se inició una cooperación en 2010 entre ambos países sobre la lucha contra la deforestación (conferencia de París el 11 de marzo y de Oslo el 27 de mayo), que desembocó en la adopción del acuerdo sobre el mecanismo REDD+ (Reducing emissions from deforestation and forest degradation) durante la COP16 de Cancún en diciembre de 2010.
Noruega tiene posiciones cercanas a las francesas en numerosas cuestiones internacionales: proceso de paz en Oriente Próximo, ayuda al desarrollo, apoyo a las operaciones de mantenimiento de la paz y al refuerzo de la eficacia de la ONU, Ucrania, etc. Noruega apoya los esfuerzos de Francia en cuestión de fuentes de financiación innovadoras (es miembro del Grupo Piloto, aplica la tasa de solidaridad sobre los billetes de avión y dedica una parte de su impuesto sobre CO2/keroseno a UNITAID). Es, junto con Francia, uno de los seis miembros fundadores de la iniciativa «diplomacia y sanidad mundial».
Sobre la cuestión de nuevos objetivos climáticos y energéticos, la posición noruega es muy cercana a la francesa. Ambos países recalcan la importancia de alcanzar un acuerdo internacional, con objetivos diferentes para los países según su nivel de compromiso. La cooperación bilateral en este tema se intensificó en vistas de la COP21 en diciembre de 2015: L. Fabius visitó Svalbard con su homólogo B. Brende en julio de 2014, organización conjunta de una conferencia sobre el Ártico y el clima en París en marzo de 2015. Noruega fue pues un aliado importante para la preparación y el éxito de la COP21 en París. Es un país muy activo en los programas medioambientales y de desarrollo sostenible (SE4ALL, REDD+ para los bosques, ha prometido una contribución de 200 M€ al Fondo Verde) y sus compromisos nacionales son ambiciosos: reducción de un 40% de las emisiones de gases de efecto invernadero para 2030; neutralidad en carbono en 2050. El fondo soberano noruego ha anunciado que iba a retirar sus inversiones de las industrias contaminantes.