Question

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Llegaban en carros cerrados y palpaban el polvo seco con los dedos, y a veces perforaban el suelo con enormes taladros para analizarlo. Los arrendatarios, a partir de los patios castigados por el sol, miraban inquietos a medida que los carros cerrados avanzaban sobre los

Y al fin los representantes de los dueños entraban en los patios y persistían sentados en los carros para dialogar por las ventanillas. Los arrendatarios estaban un momento parado al costado de los automóviles y después se agachaban en cuclillas y cogían palitos con los que hacer un dibujo en el polvo. Las damas y los chicos miraban a los hombres dialogar con los propietarios y callaban.

Si un banco o una compañía financiera eran dueños de las tierras, el enviado mencionaba: el Banco, o la Compañía, requiere, desea, insiste, debería recibir, como si el banco o la compañía fuera un monstruo con capacidad para pensar y sentir, que les hubiera atrapado. Ellos no asumían la responsabilidad por los bancos o las compañías ya que eran hombres y esclavos, mientras tanto que los bancos eran

Se quedaban sentados en los automóviles y daban explicaciones. Sabes que la tierra es pobre. Los arrendatarios, en cuclillas, asentían, creían y hacían dibujos en el polvo y, sí, lo sabían, Dios lo sabe.

Los hombres de los propietarios tenían una iniciativa fija: Sabes que la tierra se está empobreciendo.

Sabes lo cual el algodón le hace a la tierra: la despoja de todo, la desangra. Los hombres en cuclillas asentían, lo sabían, Dios lo sabía. Si tengan la posibilidad de alternar cosechas podrían bombear sangre nueva en la tierra. Y los enviados explicaban el mecanismo y el entendimiento del monstruo que era más intenso que ellos. Un hombre puede mantener la tierra si consigue

Sí, puede realizarlo hasta que un día pierde la cosecha y se ve obligado a solicitar dinero prestado al banco. Empero, comprendes, un banco o una compañía no lo tienen la posibilidad de hacer pues aquellos bichos no respiran aire, no comen carne. Los hombres acuclillados levantaban los ojos tratando entender. Dios sabe cuánto algodón habrá el año que viene.

guerras, Dios sabe qué costo alcanzará el algodón. ¿No fabrican explosivos con el algodón? Con las guerras suficientes, el algodón irá por las nubes: El año próximo, quizás.

El banco, el monstruo requiere obtener beneficios constantemente.

El monstruo fallece una vez que deja de crecer. Los perros se acercaban a los carros de los dueños olfateando y meaban en los 4 neumáticos, uno detrás de otro.

Los pollos se tendían en la tierra soleada y ahuecaban las plumas para que el polvo limpiador llegara hasta la dermis. Los hombres en cuclillas volvían a descargar la vista.

No poseemos ropa, la que llevamos está rota y en jirones. No nos encanta, sin embargo el monstruo está enfermo. monstruo. Sin embargo van a asesinar la tierra con el algodón. Poseemos que obtener el algodón velozmente previo a que la tierra fallezca. A montones de familias del este les gustará tener una parte terrestres. Los arrendatarios levantaban la vista alarmados. Entonces los hombres acuclillados se erguían airados. El abuelo se cogió la tierra y tuvo que asesinar indios para que se fueran.

Después vino un mal año y tuvo que solicitar prestado algo de dinero. Y Papá tuvo que solicitar dinero prestado. Entonces el banco se apropió de la tierra, sin embargo nos quedamos y conservamos una pequeña parte de la cosecha. No somos nosotros mismos, es el banco. Un banco no es como un

Sí, claro, gritaban los arrendatarios, sin embargo es nuestra tierra.

Aun cuando no sea buena todavía es nuestra. Es decir lo cual la hace nuestra:

El banco no es como

Sí, empero el banco no está realizado más que de hombres.

El banco es algo más que hombres.

que todos los hombres del banco detestan lo cual el banco hace, sin embargo aun de esta forma el

banco lo hace. El banco es algo más que hombres, créeme.

hombres lo hicieron, empero no lo tienen la posibilidad de mantener el control de.

abuelo asesinó indios, Papá asesinó serpientes, por la tierra.

matar blancos, que son peores que los indios y las serpientes.

que asesinar para mantener la tierra, igual que hicieron Papá y el abuelo.

los hombres de los propietarios se encolerizaron.

El banco, el monstruo es el

quedaros. El monstruo no está elaborado de hombres, sin embargo puede hacer que los

El banco, el dueño de cincuenta mil acres no se hace responsable.

Quizá podáis vivir del auxilio social.

con prolongar la mano y ya tienes una naranja, constantemente hay alguna cosecha que

Steinbeck, John, 1902-1968: Las uvas de la furia. México: Editorial Porrúa, 2005

Answer 1

Respuesta:

no te entiendo son muvhas palabras a bueno