consecuencias sobre las tres tentacione s de jesus
Respuestas a la pregunta
La primera tentación: La codicia
La primera tentación de Cristo, la de convertir las piedras en pan, es la tentación de la codicia de los bienes materiales. Jesús estaba realmente hambriento, y necesitaba pan ciertamente, pero el problema era el “cómo” obtener esas “riquezas”. Satanás lo tentaba a que usara sus poderes espirituales para conseguir algo que podía conseguir por unas pocas monedas en cualquier lugar. Poco tiempo después, cuando estaba en Caná, Nuestro Señor hizo un milagro similar, transformar agua en vino, pero lo hizo por pedido de su Madre, y no por pedido del tentador, y lo hizo por un bien espiritual: con ese pequeño milagro, «sus discípulos creyeron en Él»
La segunda tentación: El orgullo
Esta tentación tiene que ver con el “vano honor del mundo”. Volar como un helicóptero desde el pináculo del templo, seguramente haría famosísimo a Jesús. Pero no era su objetivo, Él no quería hacerse famoso, es más, huía de aquellos que lo querían proclamar Rey de Israel, porque «Su Reino no es de este mundo». Jesús no necesitaba la fama, y de hecho, sin volar, se hizo con su Pasión, Muerte y Resurrección, la persona más “famosa” del mundo, al punto que dividió la hLa tercera tentación: El poder
La tercera tentación: El poder
Esta es la tentación del poder directo sobre todas las naciones del mundo. También Jesús lo podría haber obtenido, de hecho, lo obtuvo, porque los mansos de corazón heredaron la tierra. El “problemita” es que satanás le ofrecía esos reinos si Jesús se postraba para adorarlo. Dios adorando a satanás. No creo.
Vistas así, las tentaciones no parecen tan raras. Y es que el diablo no es sonso. Tienta a cada uno según su propia naturaleza, y a todos nos tienta igual, nada más que con lo que Dios nos va a dar de todos modos. A Adán y a Eva los tentó diciéndoles «Seréis como Dioses», y mediante la vida de la gracia podemos “ser como Dios”, es decir, participar en su vida divina historia en dos.