consecuencias de que Rivadavia funde la universidad
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Bernardino Rivadavia era católico pero había adoptado las ideas regalistas. El regalismo no era una corriente de pensamiento novedosa sino que ya venía aplicándose en Europa y particularmente en España a través de las reformas borbónicas que la corona española había implementado a partir del siglo XVIII. Rivadavia quiso aplicar el regalismo en el país.11 Esta doctrina sostenía que no existía un Iglesia regida por el Papa, sino que existían comunidades nacionales de fieles a los cuales el gobierno de cada país podía dirigir. En otras palabras, a fin de cumplir con los fines del estado nacional, este podía interferir en los asuntos de la religión católica a favor de sus propias políticas públicas. El regalismo en el Río de la Plata fue aplicado por Rivadavia, contando con el apoyo de varios sectores del clero, entre los que se destacaron sacerdotes como Valentín Gómez, Gregorio Funes y Julián Segundo de Agüero.
El 1 de julio de 1822, Rivadavia -como ministro del gobernador Martín Rodríguez-, con el fin de incrementar las arcas del estado provincial, publicó una serie de decretos reformistas, que fueron completados seis meses más tarde por la ley de la Cámara de Representantes, que dictó, el 21 de diciembre, la "Ley de Reforma General".
Su articulado afectó principalmente a las órdenes religiosas o clero regular, cuyos miembros eran considerados más adictos a la Santa Sede que los sacerdotes del clero secular.
Así, el gobierno de la Provincia de Buenos Aires:
Cerró varios conventos, como los de las órdenes religiosas de los Bethlemitas, Recoletos y Mercedarios; al mismo tiempo se apoderó de todos los bienes que pertenecían a estas órdenes religiosas.
Incautó los bienes propios del Santuario de Luján, de los de la Hermandad de Caridad, del Hospital de Santa Catalina y otros.
Tomó sobre sí la responsabilidad de dar permisos para abandonar el estado religioso a quienes así lo deseaban.
Suprimió el diezmo, impuesto tradicional que servía para el sostenimiento del clero.
Limitó el número de religiosos por convento, prohibiendo que hubiera más de 30 religiosos y menos de 16 en cada uno de ellos, bajo la pena de supresión y confiscación de bienes.
Limitó la edad mínima para la profesión de los votos religiosos ya que ningún religioso podría pronunciar sus votos de consagración perpetua antes de lo 25 años de edad.
No reconoció la existencia de ninguna autoridad religiosa que residiera fuera del país y pretendiera tener poder sobre el clero secular y regular.1213
La reforma eclesiástica desató un enfrentamiento entre los periódicos de Buenos Aires. Por un lado Juan Cruz Varela y Florencio Varela defendían la posición del gobierno en El Centinela y El Lobera del Año XX. Por el otro fray Cayetano Rodríguez y fray Francisco de Paula Castañeda atacaban vigorosamente a Rivadavia. El gobierno, aplicando una vez las políticas del regalismo, decidió exiliar a Castañeda a Carmen de Patagones, pero el fraile escapó a Montevideo.
El presbítero Mariano Medrano —Vicario Provisorio de la Santa Sede al haber quedado vacante el puesto de obispo de Buenos Aires desde 1812— se opuso enérgicamente a las reformas rivadavianas.
Entre los opositores más prominentes a las políticas de Rivadavia se encontraba el fraile Francisco de Paula Castañeda, periodista y escritor satírico, que le dedicó a Rivadavia las siguientes líneas