como vive un grupo humano con normas
Respuestas a la pregunta
Respuesta: Los grupos y las relaciones personales son un área vital en la que
podemos sobrevivir mejor y más felices. Sin embargo, también
los grupos tienen su «lado oscuro». No son características negativas, ni efectos perjudiciales. La inclusión en un grupo conlleva una
serie de fenómenos aparejados que es interesante conocer y en los que
necesitamos desenvolvernos con soltura.
Estos fenómenos constituyen el «peaje» que debemos abonar para
transitar por la rápida y segura autopista colectiva que conduce al bienestar. La importancia del grupo y el miedo a sentirse excluidos facilitan
que este peaje se pague habitualmente.
La presión de grupo
Cada grupo tiene dos dimensiones: la individual y la grupal. La
dimensión individual se corresponde con el hecho de que los grupos
están formados por personas diferentes e independientes. La dimensión grupal es aquella en la que las conductas, las ideas y los sentimientos comunes están por encima de la naturaleza individual de
cada persona.
Cuando una asociación de ayuda a la inmigración actúa, lo hace según
sus criterios generales, compartidos por todos sus miembros. Sin embargo, cada integrante de la asociación le da su sello personal a los
objetivos y actividades que desarrolla la misma.
En los grupos se da un fenómeno que se denomina presión de grupo. Este
fenómeno consiste en que el grupo «exige» de sus integrantes una uniformidad que adopta diferentes formas: indumentaria, pensamientos, sentimientos, gustos, costumbres, ritos. Es una tendencia a dar más importancia a la dimensión grupal que a la individual. Pertenecer a un grupo y sentirse integrado en él significa en muchas ocasiones tener que lidiar con la presión de
grupo. Esta presión no es buena ni mala; no es positiva ni negativa. Existe.