¿Cómo se relacionan estos contenidos?
los conocimientos sociológicos dentro del contexto de las
organizaciones, los procesos de socialización, control social, conflicto y cambios sociales, situaciones que
involucran al Técnico en Seguridad en Higiene Laboral, vínculos entre ambas disciplinas, aportes de la
Psicologia a la Seguridad Industrial y a Salud Ocupacional
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Explicación:Puede decirse que el ser humano desde que nace es un ser social, destinado a vivir
en un mundo social y que, para ello, necesita la ayuda de los demás. Ese ser social, además,
se va haciendo poco a poco a través de la interacción con los otros, en un proceso continuo
de socialización. Así, el proceso de socialización será el proceso de aprendizaje de a) las
conductas sociales consideradas adecuadas dentro del contexto donde se encuentra el
individuo en desarrollo junto con b) las normas y valores que rigen esos patrones
conductuales. Es más, a medida que los niños maduran física, cognoscitiva y
emocionalmente buscan su independencia de los adultos, por lo que el necesario paso del
control externo al autocontrol hace imprescindible la interiorización de las normas y valores
característicos de la cultura donde deben insertarse.
El proceso de socialización también puede concebirse como un continuo que está en
permanente desarrollo. Se inicia desde el momento del nacimiento y va progresando y
evolucionando durante todas las etapas del ciclo vital. La socialización exige, por tanto,
adoptar unos patrones sociales determinados como propios, con el objetivo de conseguir la
necesaria autorregulación que nos permita una cierta independencia a la hora de adaptarnos
a las expectativas de la sociedad. De hecho, puede decirse que la autorregulación es el
fundamento de la socialización, la cual no sólo requiere conciencia cognoscitiva sino
también, y de manera importante, control emocional.
Por otra parte, Papalia, Olds y Feldman (2001) afirman: “Lo que ocurre en el mundo
del niño es significativo, pero no es la totalidad de la historia. Cada uno sigue escribiendo
su propia historia de desarrollo humano mientras vive”. De esta manera, los agentes de
socialización - aquellas personas o instituciones que hacen posible la efectividad de la
interiorización de la estructura y procesos sociales - se van diversificando conforme se
incrementan los contextos sociales de acción del individuo, pasándose de la exclusividad de
la familia a la influencia de otros agentes externos a la misma. Así, y aunque la familia siga
siendo el centro del mundo social del niño, éste empieza pronto a interesarse por personas
diferentes a las de su hogar, siendo especialmente importante el grupo de iguales, el cual
alcanzará su máxima relevancia en el período de la adolescencia. Este paso supone la
conversión del niño en constructor de su propio mundo social, en el que se reproducen “las
características más salientes del mundo adulto en que se desarrollan” (Sánchez y Goudena,
1996), y en el que pueden ir adquiriendo un gran bagaje de conocimiento social, ya que las
demandas que les exigen los iguales les permiten progresar en su integración.
Por tanto, los niños, en interacción con sus compañeros, desarrollan las destrezas
necesarias para su socialización y para el logro de su independencia social. Para formar