Como se puede fundamentar la naturaleza de las teorías cientificas?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
El número de enemigos de la “auténtica ciencia” es sumamente reducido. Incluso Roszak,
uno de los líderes del movimiento anticientífico, no se declara totalmente en contra de ella.
Roszak se declara anticientífico, no en el sentido de querer despojar a la cultura de la ciencia,
sino por la oposición que mantiene a la dominancia cultural que ésta ejerce, y desearía situarla en
un lugar más subordinado en la sociedad para fundamentar ésta en una sensibilidad bien definida
sobre lo misterioso, el misticismo o el movimiento romántico.
En realidad, más que oposición, lo que debe destacarse es la enorme popularidad de que goza
el término ciencia. En nuestro mundo todos los que desean alcanzar un mejor conocimiento de la
realidad que nos rodea se califican a sí mismos de científicos. ¿A qué es debido tal aceptación?
Durante muchos siglos, los sonidos que forman las palabras “ciencia” y “científico” se han visto
asociados a muchos descubrimientos que, directa o indirectamente, han supuesto cambios
espectaculares para la humanidad en diversos campos (ingeniería, medicina, guerra...). Tras
múltiples presentaciones simultáneas los términos mencionados han adquirido, a través de un
proceso de condicionamiento, una carga emotiva similar a la producida por los fenómenos a los
que se han visto asociados.
A continuación intentaremos averiguar el significado del término ciencia que lo caracteriza. Si
analizamos las disciplinas unánimemente consideradas como científicas (por ejemplo física,
química o biología), cuyos datos básicos poseen una aceptación universal, observaremos que
todas ellas:
Explicación:
Por el número de enemigos de la “auténtica ciencia” es sumamente reducido. Incluso Roszak,
uno de los líderes del movimiento anticientífico, no se declara totalmente en contra de ella.
Roszak se declara anticientífico, no en el sentido de querer despojar a la cultura de la ciencia,
sino por la oposición que mantiene a la dominancia cultural que ésta ejerce, y desearía situarla en
un lugar más subordinado en la sociedad para fundamentar ésta en una sensibilidad bien definida
sobre lo misterioso, el misticismo o el movimiento romántico.