¿como se dieron los funerales apoteósicos?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
cuando el poeta entra en agonía tenía en sus manos el Cristo que le obsequió el poeta mexicano Amado Nervo. Una composición musical de “La Marcha Triunfal” sonaría días después mientras era sepultado en la catedral de León
Roberto Sánchez Ramírez
Rubén Darío agonizante, falleció a las 10:18 de la noche del domingo 6 de febrero de 1916. Se estima que los funerales de Rubén Darío fueron más concurridos que las procesiones de Semana Santa. CORTESÍA / END
El 25 de noviembre de 1915, la población de León se enteró de que en horas de la tarde llegaría Rubén Darío, procedente de Corinto, luego de estar en Guatemala. Le acompañaba su esposa, Rosario Emelina Murillo Rivas.
Al detenerse el tren y bajar el poeta, una multitud rodeó a Rubén, solicitando les acompañara a pie, en manifestación. Se explicó que no venía en buen estado de salud por lo que se iría en un coche.
Entendida la situación ocurrió un hecho que no se ha repetido en la historia de Nicaragua. Numerosas personas desengancharon los caballos del coche, jalándolo hasta la casa donde se hospedaría el poeta, propiedad de su amigo Francisco Castro, situada de la iglesia La Recolección dos cuadras y media al este, segunda calle noroeste, donde en una parte está ahora un hostal.
Durante días fue muy visitado y atendido, en especial por el señor Castro y su esposa Fidelina Santiago de Castro, el Dr. Luis H. Debayle, convertido en su médico de cabecera. El 9 de diciembre viajó a Managua en tren expreso. Se hospedó en casa de su cuñado, Andrés Murillo Rivas. La primera vez que había estado en Managua fue en 1882, a los quince años de edad.
Explicación:
osea.. nose
jummm