Cómo saber si alguien me está mintindo de una manera sinica
Respuestas a la pregunta
Explicación:
Lenguaje no verbal
Evidentemente, debemos prestar atención al contexto antes de poder afirmar si la persona miente o no, aunque hay una serie de señales no verbales que podrían indicar que una persona miente. Por tanto, si sospechas de lo que alguien te dice, puedes prestar más atención a los gestos en vez de a las palabras.
Los mentirosos tienden a mantener sus manos ocultas. Es decir, juntan las manos, las sujetan detrás de la espalda o se las colocan en el bolsillo. También les resulta difícil sentarse en posición recta y tienen una postura más bien tensa. Algunos expertos también afirman que taparse la boca o rascarse la nariz podría indicar que la persona oculta algo, ya que es una manera de no revelar microexpresiones.
La mirada parece ser clave para detectar mentiras pues si el mentiroso tiene que pensar algo, puede mover la vista ligeramente hacia arriba o hacia la izquierda (diestros) o la derecha (zurdos). Si les miras directamente a los ojos, suelen evitar el contacto visual.
2. Respiración
La respiración podría indicar que una persona está mintiendo. Su forma de respirar suele ser más rápida y la boca suele estar seca, pues la persona se encuentra en una situación más bien tensa, y quiere evitar a toda costa que le pillen. Esto puede hacer que trague constantemente. En realidad, esto ocurre porque su corazón late más rápido y los pulmones requieren más aire que en una situación de clama.
3. Cómo habla
Puesto que la persona miente y su respiración se ve afectada, su forma de hablar también es diferente. Los expertos dicen que o bien habla más rápido o habla más lento de lo normal. Asimismo, cuando una persona dice una mentira, su voz puede llegar a ser más aguda, pues la tensión hace que las cuerdas vocales estén tensas. Si pones al mentiroso en apuros, es más probable que llegue a tartamudear.
4. Qué dice
Cuando mentimos, nos sentimos más vulnerables e incómodos (a no ser que seamos psicópatas), y a pesar de que la persona sea un mentiroso con experiencia, no va a querer ser pillado. Esto hace que trate de cambiar de tema rápidamente para evitar que la mentira se le vaya de las manos. Además, es menos que el embustero use las palabras "yo" y "mío", en un intento de distanciarse psicológicamente de sus historias falsas.
5. Conexión entre lo que dice y lo que hace
En vez de mirar las conductas por separado, es más importante hacer una valoración general de todo lo que envuelve la situación. Cuando una persona es honesta, lo que dice y lo que hace se sincronizan y forman un todo coherente. No solo eso, sino que se sincronizan también con dicha situación.
Si conoces a la persona que miente, es posible que sea más fácil de detectar su falacia, pues los expertos creen que puedes fijarte en si hay un cambio respecto a su comportamiento habitual y si hay poca coherencia entre lo que se dice y lo que se hace (tal y como nos mostró de manera hilarante la serie de Los Simpsons). Además, cuando alguien simula una emoción, ésta solamente puede verse alrededor de la boca. Por ejemplo, para la emoción de alegría, solamente mueve la boca, en lugar de mover la mandíbula, la frente y los ojos.
6. Sudor
Mentir provoca que incluso los mentirosos experimentados noten cierto grado de estrés o presión. Y cuando mentimos, incluso si es una mentira sin mucha importancia, sudamos más. Esto ocurre porque la sudoración es una respuesta natural al estrés. Así pues, sudar es bastante habitual cuando se dice una mentira y una señal para detectar a un mentiroso.
7. A la defensiva
Los mentirosos sonríen menos porque están en una situación tensa, pero si encima les pones a prueba, por lo general se vuelven extremadamente defensivos. Si les haces una pregunta, pueden evitarla e incluso negarse a contestar, y si consigues que responda lo haran con una frases del estilo "¿Por qué quiere saber eso?" o "Eso no es importante ahora". Esto ocurrirá porque seguramente está contra las cuerdas