como podemos hacer para prevenir la anemia en las ninas y los ninos
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Para prevenir la anemia, las niñas y los niños deben consumir alimentos de origen animal ricos en hierro y consumir los suplementos de hierro que reciben en sus controles médicos.
Explicación:
1. El primer paso para prevenir la anemia infantil es el correcto control prenatal. La futura mamá, cuando está embarazada, debe controlar la ingesta correcta de las vitaminas que necesita su cuerpo y consumir la cantidad de hierro recomendada por su médico.
2. Cuando el bebé nace, la lactancia materna le aportará el hierro necesario en sus primeros meses de vida. En caso de lactancia artificial, debes consultar con el pediatra cuál es la fórmula infantil más apropiada.
3. Al crecer, el niño debe seguir una correcta alimentación, base esencial para obtener un aporte de hierro adecuado para su buen crecimiento y desarrollo. El hierro del organismo proviene de la alimentación, por lo que resulta necesario tomar de forma habitual alimentos ricos en hierro para mantener buenos depósitos del mineral. Las principales fuentes de hierro son:
• Los alimentos de origen animal: las carnes rojas (cordero y ternera), el marisco (almejas, mejillones y ostras), el hígado de cerdo, los huevos y la leche.
• Algunos vegetales, como legumbres (principalmente, lentejas, judías y garbanzos), cereales integrales, frutos secos (sobre todo, almendras, avellanas y nueces) y verduras de hojas verde oscuro, como las espinacas. També son ricas en hierro algunas frutas como la uva o el mango.
También es muy importante la forma de absorción del hierro, que es más efectiva cuando se consume con el ácido ascórbico o ácido cítrico, que se encuentran en la naranja y en el limón. En cambio, algunos alimentos pueden dificultar su absorción, como por ejemplo la leche de vaca.
Respuesta:
Para prevenir la anemia, los farmacéuticos recomiendan consumir alimentos ricos de hierro como el hígado y otras carnes, mariscos, frutas secas como melocotones, ciruelas y pasas, nueces, verduras, sobre todo las de hojas verdes, como la espinaca y el brócoli