cómo funciona el electromagnetsmo en el yelo de un avión
Respuestas a la pregunta
Explicación:
Ikerlan está desarrollando para la empresa Airbus DS una novedosa aplicación de inducción electromagnética para proteger contra el hielo las alas de aviones. Esta tecnología se caracteriza por su eficiencia y rapidez cuando se utiliza como método de calefacción. De hecho, se espera obtener eficiencias globales energéticas que superen el 90%.
Este proyecto de I+D, llamado InductICE, finalizará en julio de 2019, y ha recibido una financiación de 250.000 euros del programa CleanSky 2, una asociación entre la Comisión Europea y la industria que busca modernizar el sector aeronáutico del continente.
Los bordes de las alas pueden acumular una capa de hielo que mengua su capacidad aerodinámica, lo cual tiene implicaciones en la seguridad del vuelo. El centro tecnológico vasco, que desarrolla aplicaciones basadas en el electromagnetismo para diferentes sectores, implementará un método para calentar una fina malla (0,1 milímetros) de metal integrada en las alas de las aeronaves fabricadas en material compuesto.
La inducción es un método que se emplea cada vez más para calentar superficies metálicas, por su rapidez de funcionamiento, porque permite el control preciso de la potencia aplicada y no requiere contacto directo entre la fuente y el elemento a calentar. En la aplicación en desarrollo, el elemento a calentar será una fina malla metálica integrada en la cara exterior del laminado de material compuesto del borde de ataque de las alas, y por debajo de él se situará el bobinado inductor.
Inducción electromagnética: ahorro y eficiencia
Se espera obtener eficiencias globales energéticas que superen el 90%, mejorando las alcanzadas con los sistemas convencionales en uso. El sistema será totalmente modular, y podrá funcionar como sistema antihielo (calefacción en modo continuo) o de deshielo (calefacción en modo cíclico), lo que traerá la ventaja de una mayor fiabilidad.
Según la responsable de este proyecto en IKERLAN, Irma Villar, “los sistemas de protección contra el hielo son uno de los elementos de los aviones que más energía consumen, por lo que las empresas del sector están buscando tecnologías que permitan implementar alternativas más eficientes. La inducción puede contribuir de forma positiva”.
Multitud de dispositivos y equipos que utilizamos habitualmente en el ámbito industrial y del consumo están basados en el electromagnetismo en componentes como transformadores, motores o generadores. Además, durante los últimos años la industria ha incorporado aplicaciones de inducción electromagnética en soldadura, tratamientos térmicos o calentamiento; en las cocinas domésticas y en el sector salud, con escáneres y terapias de tratamiento, dice IKERLAN.
En este sentido, el centro tecnológico colabora con la empresa Copreci en el desarrollo de encimeras de inducción, con CAF en el desarrollo de sistemas de carga inalámbrica para el sector ferroviario, con Orona en el desarrollo de motores y actuadores para ascensores, y ha participado en proyectos Etorgai para el desarrollo de cargadores inalámbricos de vehículos eléctricos con empresas como Batz.
Carga por inducción para vehículos eléctricos
Otro ejemplo es el proyecto UNPLUGGED, dirigido por Enide y Fka, que investigar cómo el uso de carga por inducción en entornos urbanos mejora la comodidad y la sostenibilidad de la movilidad usando vehículos eléctricos. En concreto el objetivo es estudiar cómo se puede facilitar la plena integración de la infraestructura en la ciudad, cómo lo perciben los clientes y el grado de aceptación que se lograría.
Con este nuevo método que se pretende desarrollar, el usuario de VE simplemente colocará su coche sobre una plataforma de carga situada en el suelo y sin ningún tipo de contacto físico ni esfuerzo adicional conseguirá cargar la batería de su vehículo, explica en su web Endesa, parte del Consorcio en el que también están Volvo, Centro Ricerche Fiat, Hella o Continental, Enel o Transport for London, entre otros.
La transferencia de energía inductiva (IPT) se produciría entre un dispositivo integrado en el vehículo eléctrico y otro enterrado en el pavimento de modo completamente inalámbrico.
Entre sus ventajas, Endesa destaca su sencillez y comodidad puesto que al no tener que conectar físicamente ningún cable, no es necesario bajarse del vehículo durante la carga. Además, es seguro contra el vandalismo porque todos los dispositivos se encapsulan en el vehículo y en el suelo y funciona tanto con temperaturas extremas como sumergido en agua o cubierto de hielo y nieve, añade.