como era la economía en Francia lyan en 1900
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Respuesta:
La obra destaca los elementos po-sitivos y negativos de la economía francesa. En vísperas de la Primera Guerra Mundial, Francia era la se-gunda potencia financiera del mundo, superada sólo por Inglaterra; la se-gunda potencia colonialista y la cuar-ta en el comercio del planeta. La Bol-sa de París rivalizaba con las de Londres y Berlín. El capital finan-ciero francés desempeñaba un papel de primer orden en los mercados fi-nancieros internacionales, y en las inversiones industriales de varios continentes. Como potencia colonia-lista, Francia desarrolló una estrate-gia sin precedentes y aumentó sus posesiones, durante el periodo de 1900 a 1914, de uno a once millones de kilómetros cuadrados. Cochinchi-na y Camboya, Madagascar, Senegal, Guinea, Túnez y Marruecos se in-corporaron al vasto imperio galo. En el aspecto comercial, empero, el país perdió terreno en las últimas déca-das, pasando del segundo al cuarto rango, detrás de Inglaterra, Estados Unidos y Alemania. Las causas de este repliegue han sido discutidas por algunos especialistas.Pese a todo, la industria del país no estaba tan mal. El crecimiento de la producción industrial francesa, que entre 1870 y 1896, mostró un ritmo de crecimiento de 1.6 por cien-to; entre 1896 y 1913 alcanzó una media anual de 2.4 por ciento. En vísperas de la guerra, Francia ocupa el primer sitio en la exportación mundial de automóviles. A princi-pios del siglo xx las industrias de punta: acero, carbón, metalurgia, electricidad, textil y la producción automotriz, conocieron un gran de-sarrollo. Sin embargo, el grueso de esta planta industrial se concentra-ba en París y su área cercana, mien-tras otras regiones seguían siendo eminentemente rurales.Por cierto, las cosas no estaban nada bien para la mayoría de campe-sinos. Alrededor de 22 millones de franceses estaban repartidos en 35 000 comunidades rurales, y aun cuando la agricultura era la actividad con más trabajadores empleados, estaba muy lejos de ser la primera en ingre-sos. La dimensión de las explotaciones agrarias muestra una gran desigual-dad, pues si el minifundio —cultivos de una a diez hectáreas— representa-ba 85 por ciento de la tierra cultiva-ble del país, sólo 25 por ciento de ellas estaban cultivadas. El pequeño agricul-tor era realmente pobre y técnicamente atrasado; y el aparcero a menudo tenía que aceptar contratos leoninos. Los asalariados rurales, alrededor de 1.7 mi-llones de personas, enfrentaban con-diciones duras de vida y salarios muy modestos. A pesar de la mecanización de la agricultura, los campesinos tra-bajaban alrededor de 11 horas en in-vierno y 14 en verano.