Cómo dialoga el ciervo y la nube
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
LUCAS.
Buen día, Matea. Manejas muy bien la bicicleta.
MATEA:
Sí, Lucas la manejo bien y corro mucho con ella pero mira lo que nos pasa.
SIMONA:
Buen día, Lucas. Buen día, Matea. Bueno la verdad es que no parece buen día. Toda la mañana está lloviendo. Parece que esta nube gigante no se quiere ir de aquí.
LUCAS.
Sí, amigas. Estuve toda la noche con la ilusión de acompañaros en bicicleta pero esta lluvia no nos deja salir.
SIMONA:
¡Qué fastidio! Yo ya estoy demasiado aburrida. ¿Qué podemos hacer, abuelo Alfredo?
Abuelo ALFREDO:
Parece que ustedes están muy enojados con la nube.
SIMONA:
Pues sí. Esta nube es muy mal educada y grosera. No para de echar agua y agua.
Abuelo ALFREDO:
Pero es que el agua es muy necesaria. Si no llueve la nube, no podríamos beber agua ni reparar nuestros alimentos. ¿Qué os parece si vais a hablar con la nube?
MATEA:
Yo no sabía que se podía hablar con la nube. Vamos a ver si nos entiende.
LUCAS.
Hola, señora NUBE. Nos sentimos muy mal. Estamos muy enojadas. Necesitamos salir en bicicleta. Hemos estudiado mucho esta semana y tenemos que despejar nuestras mentes.
NUBE:
Yo también necesito llover. Los ríos tienen que llevar agua a las poblaciones. Las plantas necesitan beber las gotas que las envío. El aire necesita limpiarse con mis gotas.
Abuelo ALFREDO:
Vamos a ver, señora Nube, Matea, Lucas y Simona.. Podemos buscar una solución que sea buena para todas nosotras.
NUBE:
Tengo una idea. Acordaremos establecer unos turnos. Yo crearé lluvia un rato y vosotras podréis jugar a saltar en mis charcos. Y, después, me tomaré un descanso para que podáis montar en vuestras bicicletas.
SIMONA:
Parece una buena idea. Nos dejas salir un ratito y luego vuelves a llover. ¿Os parece bien a todas?
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Explicación: