¿Cómo desarrollamos la técnica de
autoverbalización?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Las autoinstrucciones son una técnica que permite la modificación o sustitución de las autoverbalizaciones internas que el sujeto utiliza antes, durante y después de enfrentarse a una situación aversiva, por otras verbalizaciones más adaptativas.
A continuación hablaremos sobre los objetivos de las autoinstrucciones, las fases con las que se realiza el entrenamiento en autoinstrucciones, cuál es la tasa de eficacia y finalmente cuándo se recomienda la aplicación de este entrenamiento en autoinstrucciones.
El Entrenamiento en Autoinstrucciones consta de 5 fases:
Modelado Cognitivo
Modelado Cognitivo Participante
Autoinstrucciones en voz alta
Autoinstrucciones en voz baja
Autoinstrucciones encubiertas
Explicación:
Durante todo el proceso de desarrollo del Entrenamiento en autoinstrucciones vamos a contar con dos figuras importantes: el modelo, es decir, la persona que guía al sujeto que quiere cambiar sus verbalizaciones, y la persona que observa a este modelo, la cual denominaremos observador/sujeto.
A continuación os explicaremos todos los procedimientos del Entrenamiento en Autoinstrucciones con un ejemplo de su ejecución: enseñamos a un adolescente a que lleve a cabo más autoinstrucciones positivas cuando ha de pensar que se ha de afrontar a un examen.
1. Modelado cognitivo
El terapeuta lleva a cabo toda la conducta: dice en voz alta la nueva autoinstrucción y ejecuta la conducta. El sujeto/observador sólo escucha, atiende y observa la información que el modelo le ofrece.
El modelo está delante de una hoja de papel que simula un examen y se dice en voz alta: “Tranquilo, sabes el temario y lo harás bien”. El adolescente mientras observa. El modelo se sienta y simula empezar a hacer el examen.
2. Modelado cognitivo participante
El terapeuta lleva a cabo la verbalización de las instrucciones mientras el sujeto realiza la tarea.
El modelo se va diciendo a sí mismo frases positivas, autoinstrucciones positivas, y con ello aumenta su autoeficacia. El adolescente mientras observa.
3. Autoinstrucciones en voz alta
El sujeto es el que realiza la tarea a la vez que verbaliza las instrucciones en voz alta, de forma manifiesta. A partir de esta fase, el terapeuta lleva a cabo los refuerzos pertinentes de estas verbalizaciones y acompaña al sujeto, pero ya sin realizar la conducta.
El adolescente se pone delante de una hoja de papel que simula un examen y se dice en voz alta: “Tranquilo, sabes el temario y lo harás bien”. El modelo ahora es quien observa y le ayuda a recordar las frases motivadoras.
4. Autoinstrucciones en voz baja
El sujeto realiza la tarea verbalizando las instrucciones en voz baja, susurrando.
El adolescente se va repitiendo las frases motivadoras anteriores, pero ahora lo hace en voz baja.
5. Autoinstrucciones encubiertas
El sujeto realiza la tarea mientras piensa las autoinstrucciones, de forma interna.
El adolescente se va repitiendo las frases motivadoras anteriores, pero ahora lo hace para sí mismo.