Cómo debe ser la dieta de un recién nacido,niño,adulto y anciano
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
En 1979 la FAO (Organización de la Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación) proclamó el 16 de octubre como Día Mundial de la Alimentación. La idea: poner de relieve los problemas que el hambre genera en el mundo. Y es que, hoy en día, desgraciadamente aún existen millones de personas que padecen hambrunas, mientras que, de forma paradójica, en muchos países del ‘primer mundo’, (en los que los ciudadanos sí tienen qué llevarse a la boca), se siguen unas pautas de nutrición erróneas que muchas veces derivan en sobrepeso y problemas de salud.
Así, mientras los organismos internacionales tratan de encontrar las fórmulas para paliar el hambre mundial (o debiéramos pensar que a ello dedican sus esfuerzos…), nosotros queríamos aprovechar esta fecha para tratar de conseguir un objetivo muchísimo más modesto: proponeros unos consejos con el fin de que, quienes tenemos la suerte de alimentarnos cada día, lo hagamos de la manera más saludable posible. En este sentido, aunque hay pautas generales, los expertos tienden a hacer ciertas diferencias en función de la edad del individuo. Estas son algunas pistas:
DE 4 A 14 AÑOS
‘La infancia es la época idónea para adquirir conocimientos; es decir, es la edad en la que se debe aprender a educar el gusto. A comer se aprende comiendo’, afirma Toni Massanés, director de la Fundación Alicia (centro de investigación dedicado a la innovación tecnológica en cocina y a la mejora de los hábitos alimentarios). Pero, como destaca la Dra. Vidales, directora médica de la Clínica Nutrimedic de Madrid, ‘las necesidades varían: hacen falta más proteínas, por ejemplo, en la época del crecimiento, porque son los ladrillos que forman el edificio, constituyen los elementos básicos en la formación de los músculos y los huesos’. Además, como señala el Dr. Ordovás, profesor de Nutrición y Genética, ‘tenemos que hacer énfasis educativo en la importancia de evitar las llamadas calorías vacías, comida basura, y dirigir a los niños hacia una alimentación más completa y nutritiva; en definitiva, más saludable’.
Explicación: