como concluyo la paz desde mi actitud con los demas(mínimo 5 hojas)
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
primero pedirle a Dios que te De la paz y terr al Espíritu Santo, por que la paz es uno de sus frutos
Respuesta:El mundo tal vez sea una construcción mental, una categoría o una idea
cartesiana envuelta en la duda. En cambio, el ser humano es una realidad
tangible con la que nos topamos todos los días, aunque, en demasiadas ocasiones, la sigamos esquivando. Dialogar con uno mismo —monologar, si se
quiere— no es tarea frecuente ni generalizada. De tanto mirar a los otros
hemos perdido nuestra imagen especular. El yo espejo se ha difuminado. El
espejo del «yo» se ha empañado, al menos.
Sin embargo, hay que dar un fuerte aldabonazo a las conciencias para
despertar de este duradero letargo y volver a los orígenes, al examen cotidiano sobre nuestra conducta en busca, quizá, de una identidad perdida. La
suma de los seres humanos tal vez no sea la totalidad del mundo, pero... la
caridad comienza por uno mismo y puede prolongarse hasta los demás.
Hoy estas reflexiones en tomo al yo son no solo esenciales, sino indemorables en su aplicación. Estamos instalados en un período en el que hablar de
paz es como clamar en el desierto. Es mucho más frecuente, desgraciadamente, oír hablar de guerra. La guerra está de moda: la de la que (o de las
que) nos hablan los medios de comunicación social y aquellas otras, encubiertas por la pobreza de medios, en las que el silencio se alia con la crueldad. También los medios tienen sus preferencias —<j sus necesidades— en
esta cuestión. Las muertes tienen un precio, unas menos valiosas que otras,
al parecer.
Siendo, pues, a nuestro entender el ser humano el que está en el eje
alrededor del cual gira la cosa humana, vamos a hablar de paz, un vocablo
muchas veces circunscrito a la ausencia de violencia en general o de guerra
en particular, y también hablaremos de su protagonista, aquel homo sapiens
sapiens, sumido, muchas veces, en la ignorancia de su intimidad. Qué es la
paz no es pregunt a bana l porque su sola definición entrañ a serias
dificultades. Intentaremos, no obstante, abordar la cuestión para seguir
luego con la búsqueda de su existencia en el deseo personal. Pero, no
olvidemos que la paz es un derecho, tal como se dijo en la reunión de Las
Palmas de Gran Canaria (1997) en la declaración solemne que hicieron los
expertos reconnaissent que tout homme a un droit á la paix qui est inhérent a
sa dignité de personne hutnaine. Reafirmando el entonces director general de
la UNESCO, Federico Mayor Zaragoza, el reconocimiento del derecho a la
paz con el mismo rango que los derechos del hombre enunciados en 1948.