Cómo algunos presos lograron la libertad emocional
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
L averdad ayudaron demaciado
Explicación:
Respuesta:
2. Componente afectivo de los principales problemas en entornos
privados de libertad
En lo relativo al plano afectivo, los estudios y artículos de las últimas décadas se han centrado, mayoritariamente, en conocer el dolor del prisionero
(Sykes, 1999) sobre la base del estrés en sujetos privados de libertad (Ivancevich y Matteson, 1988; Harding y Zimmermann, 1989; Haney, 2003; Ruiz,
2007). Es cierto que los procesos de estrés tienen una carga fuerte, que puede
resumirse en: estrés de encierro, donde la ansiedad viene producida por la
pérdida del bienestar y el miedo a la incertidumbre de lo que encontrará en
dicho contexto; estrés de estancia, por el cambio en la forma de vivir con una
adaptación nunca óptima al tener malestar por la propia privación y por un
entorno hostil; y estrés de vuelta a la libertad, por las dudas sobre la aceptación familiar, social, laboral, además de asuntos como la economía personal,
vivienda, inserción laboral, etc. No obstante, es digno de mención que empiezan a surgir publicaciones centradas en la dimensión emocional (Páez y Ruiz,
2002; Tangney, Stuewig, Mashek y Hastings, 2011; Czubak, 2013) de manera
holística, para comprender y analizar dicha situación de encarcelamiento.
En este escrito la pretensión inicial está en evidenciar el alto componente
afectivo de los problemas de los sujetos que pasan por una institución penitenciaria. Por tanto, desarrollar la educación emocional es un buen recurso a
la hora de reconocer, gestionar y manejar las emociones y, en consonancia,
asumir dicha problemática desde una posición más beneficiosa e inteligente.
Explicación:
La ausencia de responsabilidad y autonomía resulta un aspecto característico de la vida en prisión. El sentimiento de culpabilidad, si no por el delito,
por haber llegado ahí, junto con la baja autoestima por la ausencia de independencia, potencian una predisposición alejada de la cooperación, la convivencia y del asumir la normatividad y el clima de la prisión que, a su vez, es
complejo y poco dispuesto a aceptar a nuevos miembros.
Buena Suerte