cio: LAS ESCUADRAS de Juancho Dique entraron sigilosas. Como si no pisaran la tierra rodearon la población de Chengue, en Ovejas, Sucre. Las órdenes venían de los comandantes de las Autodefensas. La operación contemplaba rapidez y uso de las armas silenciosas. Cuatro de la mañana. Los veintiocho hombres que debían morir fueron amordazados y sus familiares amarrados a sus camas. Los juntaron en la plaza. Los ochenta paramilitares, distribuidos en puntos estratégicos, con los rostros tiznados, las uñas pintadas de negro hablaban bajo por los walkie talkie. No querían despertar sospechas a los frentes de la guerrilla que acampaban a pocos kilómetros ni a la Infantería de Marina. Dejaron los tres camiones lejos, camuflados.
Nudo: A los campesinos que figuraban en la lista, tendidos bocabajo, les quitaron la cinta de la boca para que dijeran su nombre y el número de su cédula al uniformado que improvisó una oficina con un computador portátil. Con la poca voz que le quedaba, el prisionero explicó que no tenía nada que ver con la guerra. Soy campesino, atiendo un cultivo de maíz, por favor no me maten, tengo mujer y tres hijos pequeños. El interrogador pidió que bajara la voz, que sólo investigaban a los amigos de la guerrilla; mandaba claves por radio y daba señal al guardia para que se lo llevara. El golpe seco del mortero de hierro sobre la frente de los condenados rompía el cráneo en dos partes y el quejido gutural llegaba hasta algunas casas. Armas silenciosas. Los habitantes apagaron los ventiladores, alistaron los niños y salieron como serpientes por los patios en busca de los matorrales. El mismo bochorno espectral acompañaba a los que morían y escapaban.
Desenlace: Los sacrificados yacían en distintos lugares. Los filos de los cuchillos y machetes también se agazaparon en el silencio, el mismo que acompañó a la otra escuadra que pintaba las paredes del pueblo: Fuera guerrilla comunista. Auc. Al ver los helicópteros, los paramilitares enterraron las armas en la arena, hicieron el mapa y se desplegaron por la zona. La Compañía Dragón movilizó sus tropas cuando las víctimas se desangraron y las familias trataban de remendar las cabezas. Los pilotos de la Fuerza Aérea de Colombia observaron los chorros de humo de las viviendas incendiadas, la hilera de mujeres y niños como hormigas arrieras en busca de la carretera y la montaña. Cuando los nuevos hombres armados que salían de las aeronaves se desperdigaron por Chengue, en las calles sólo se veían banderas blancas y mortajas ensangrentadas. Se llama doble filo 2
Esta es la pregunta. ¿Que significa en el texto la expresión"Los filos de los cuchillos y los machetes se agazaparon en el silencio"
Ayuda por favorrr
Respuestas a la pregunta
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1
Respuesta:
no hrmna, estas jodid JSAKAKQJQJQ
Explicación:
como se llama el libro/cuentoo?
camilogalvisvega:
se llama doble filo 2
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