Célula que mide de 8 a 10 micras, al madurar va perdiendo el núcleo por extrusión, fragmentación o disolución:
Respuestas a la pregunta
Los glóbulos rojos son discos bicóncavos (como una esfera hueca) compuestos de hemoglobina, una sustancia rica en hierro. Su función es transportar el oxígeno, al unirse a la hemoglobina, desde los pulmones a todas partes del cuerpo, ya que por su tamaño, forma y flexibilidad se pueden introducir entre pequeños espacios.
Los glóbulos rojos derivan de la célula madre de la médula ósea y son, en origen, células con núcleo cuya maduración en la médula se lleva a cabo con la síntesis de la hemoglobina y la pérdida de función del núcleo, que finalmente es expulsado. En este momento, esa célula nueva se llama reticulocito, que se transforma en glóbulo rojo o hematíe cuando pierde material y se hace más pequeño. El eritrocito ya maduro pasa al torrente sanguíneo.
La hormona que regula la formación de glóbulos rojos se llama eritropoyetina y se produce en unas células de los riñones. La función de la eritropoyetina es estimular a la médula para que forme más glóbulos rojos y que no falten en los momentos críticos, por ejemplo, en una hemorragia. Se puede administrar una hormona sintética de eritropoyetina en una inyección cuando la producción de los glóbulos rojos ha disminuido como consecuencia, por ejemplo, de la insuficiencia renal o la quimioterapia.
Los glóbulos rojos o hematíes tienen una vida media de unos 120 días y una vez llegados a su fin se eliminan por el hígado y el bazo. Para que se formen, la médula ósea necesita hierro, vitamina B-12, ácido fólico, vitamina B-6, entre otros elementos. Es muy importante incluir en la dieta alimentos que nos aporten estos nutrientes.
Estos son los parámetros normales más significativos que se relacionan con los glóbulos rojos:
El recuento normal de glóbulos rojos es de 4,5 a 6 millones por milímetro cúbico para los hombres y de 4 a 5,5 millones por milímetro cúbico para las mujeres.
La hemoglobina normal para los hombres es de 14 a 18 gramos por 100 mililitros de sangre y de 12 a 16 gramos para las mujeres.
El hematocrito es el porcentaje del volumen que ocupan los glóbulos rojos en la sangre, lo normal es de 42 a 54% para el hombre, y de 38 a 46% para las mujeres.
Cuando hay una pérdida de sangre o existe una disminución de la producción de glóbulos rojos en la médula, como ocurre por ejemplo con ciertas enfermedades y durante la quimioterapia, estos valores descienden, hecho que conocemos como anemia. Si su descenso es leve, la persona puede notar una cierta fatiga, pero si el descenso es más pronunciado puede sentir cansancio, mareo e incluso dificultad para respirar. En este caso, necesitaremos descansar. Para recuperar la anemia en muy importante mantener una alimentación rica y suficiente y tomar alimentos que contengan hierro. Además, el médico recetará, si es necesario, un suplemento de hierro, inyecciones de eritropoyetina e incluso una transfusión sanguínea en caso necesario.
2.2 ¿QUÉ SON LOS LEUCOCITOS O GLÓBULOS BLANCOS?
Los glóbulos blancos son los encargados de defender al organismo de las infecciones. Se producen a partir de la célula madre en la médula ósea, donde se almacenan, y se liberan al torrente sanguíneo cuando el organismo los necesita. Los glóbulos blancos viven en la sangre unas doce horas. Se diferencian de los glóbulos rojos porque poseen núcleo y son más grandes. El recuento total de glóbulos blancos es de 5.000 a 10.000/mm3 y hay cinco tipos distintos: los neutrófilos, eosinófilos y basófilos, que forman el grupo llamado granulocitos, los linfocitos y los monocitos.