carta de simon bolivar a antonio jose de sucre????
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
DE SIMÓN BOLÍVAR PARA ANTONIO JOSÉ DE SUCRE
Caracas 18 de noviembre 2020
“Bolívar, quien redactó y publicó en 1825 su resumen sucinto de la vida del general Sucre, único trabajo en su género realizado por él, no escatimó elogios ante la hazaña culminante de su fiel lugarteniente:
"La batalla de Ayacucho es la cumbre de la gloria americana, y la obra del general Sucre. La disposición de ella ha sido perfecta, y su ejecución divina". Las generaciones venideras esperan la victoria de Ayacucho para bendecirla y contemplarla sentada en el trono de la libertad, dictando a los americanos el ejercicio de sus derechos, y el imperio sagrado de la naturaleza".
"Usted. está llamado a los más altos destinos, y yo preveo que Usted. es el rival de mi Gloria. (Bolívar, Carta a Sucre, Nazca, 26 de abril de 1825) ".
"El Congreso de Colombia hizo entonces a Sucre General en Jefe, y el Congreso del Perú le dio el grado de Gran Mariscal de Ayacucho,".
Explicación:
Respuesta:
nuestra patria Bolivia.DEL MARISCAL SUCRE AL LIBERTADOR BOLÍVARPotosí, a 4 de abril de 1825A su excelencia el general Bolívar.Mi general:Hace una hora que recibí la carta de usted del 21 de febrero. Ella me ha dado un gran disgusto, pero nocon usted sino conmigo mismo que soy tan simple que doy lugar a tales sentimientos. Este disgusto es loque usted me habla en cuanto a las provincias del Alto Perú, respecto de las cuales he cometido un errortan involuntario, pero mi objeto fue cumplir las intenciones de usted. Mil veces he pedido a ustedinstrucciones respecto del Alto Perú y se me han negado dejándome abandonado; en este estado yo tuve presente que en una conversación en Yacan, pueblo cerca de Yanahuanca, me dijo usted que suintención para salir de las dificultades del Alto Perú era convocar a una asamblea de estas provincias.Agregando a esto lo que se me ha dicho de oficio de que exigiese de Olañeta que dejara al pueblo enlibertad de constituirse, creí que este era el pensamiento siempre de usted; nunca me figuré que setrataba de Buenos Aires, porque ¿qué pueblo, qué orden ni gobierno había en Buenos Aires?Además, ¿por qué esta misma carta que usted me escribe ahora no la hizo tantas veces que le he pedidoórdenes sobre este país? ¿Yo soy adivino para penetrar qué es lo que se quiere después de habersemostrado otra cosa? Usted sabe, mi general, que yo no tengo aspiración ni mira alguna ni en este ni enningún país; mi desvelo es complacer a usted en su carrera de salvarnos. He creído en mi corazón que elcorazón de usted es todo por el bien de la América y, persuadido de esto, he creído que el examen deotras materias pudiera ser malo y, así, he pensado que me tocaba únicamente obedecer y seguir al genioque ha tomado a su cargo nuestra redención.Yo me acuerdo que, el día que pasé al Desaguadero, dije a usted que el emprender nuevos compromisosme iba a costar mil disgustos y ya empiezo a sentirlos. Por amistad a usted y por amor a la patria vine aestas provincias contra toda mi voluntad, pues mis deberes como colombiano y como general estabansatisfechos en el Desaguadero. Yo creo haber dicho a usted que me había de pesar el venir a estos países, cuya situación iba a ponerme en compromisos.