Breve resumen de el Barranco Corto no largo que sea un breve resumen doy 20 puntos el que esta bien corona nada de porquerias
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
El cuento trata de un lugar llamado barranco, era donde encerraban sus animales don Garayar y doña Grimalda, en el barranco Nicacha y Pablucha eran los que cuidaban los becerros de doña Grimalda, un día las mulas y caballos de Garayar, entraron a las madrineras(lugar donde se les ubica a los becerros),
Explicación:
eso encontre no se si ese sera el cuento
Respuesta:
En el barranco de K’ello-k’ello se encontraron, la tropa de caballos de don Garayar y los becerros de la señora Grimalda. Nicacha y Pablucha gritaron desde la entrada del barranco:
-¡Sujetaychis! ¡Sujetaychis! (¡Sujetad!)
Pero la piara atropelló. En el camino que cruza el barranco, se revolvieron los becerros, llorando.
-¡Sujetaychis!
Los mak’tillos Nicacha y Pablucha subieron, camino arriba, arañando la tierra.
Las mulas se animaron en el camino, sacudiendo sus cabezas; resoplando las narices, entraron a carrera en la quebrada, las madrineras atropellaron por delante. Atorándose con el polvo, los becerritos se arrimaron al cerro, algunos pudieron volverse y corrieron entre la piara. La mula nazqueña de don Garayar levantó sus dos patas y clavó sus cascos en la frente del “Pringo”. El “Pringo” cayó al barranco, rebotó varias veces entre los peñascos y llegó hasta el fondo del abismo. Boqueando sangre murió a la orilla del riachuelo.
La piara siguió, quebrada adentro, levantando polvo.
-¡Antes, uno nomás ha muerto! ¡Hubiera gritado, pues, más fuerte! -Hablando, el mulero de don Garayar se agachó en el canto del camino para mirar el barranco.
-¡Ay señorcito! ¡La señora nos latigueará; seguro nos colgará en el trojal!
-¡Pringuchallaya! ¡Pringucha!
Mirando el barranco, los mak’tillos llamaron a gritos al becerrito muerto.
La Ene, madre del “Pringo”, era la vaca más lechera de la señora Grimalda. Un balde lleno le ordeñaban todos los días. La llamaba Ene, porque sobre el lomo negro tenía dibujada una letra N, en piel blanca. La Ene era alta y robusta, ya había dado a la patrona varios novillos grandes y varias lecheras. La patrona la miraba todos los días, contenta:
-¡Es mi vaca! ¡Mi mamacha! (¡Mi madrecital).
Le hacían cariño, palmeándole en el cuello.
Esta vez, su cría era el “Pringo”. La vaquera lo bautizó con ese nombre desde el primer día. “El Pringo”, porque era blanco entero. El Mayordomo quería llamarlo “Misti”, porque era el más fino y el más grande de todas las crías de su edad.
-Parece extranjero -decía.
Pero todos los concertados de la señora, los becerreros y la gente del pueblo lo llamaron “Pringo”. Es un nombre más cariñoso, más de indios, por eso quedó.
Los becerreros entraron llorando a la casa de la señora. Doña Grimalda salió al corredor para saber. Entonces los becerreros subieron las gradas, atropellándose; se arrodillaron en el suelo del corredor; y sin decir nada todavía, besaron el traje de la patrona; se taparon la cara con la falda de su dueña, y gimieron, atorándose con su saliva y con sus lágrimas.
-¡Mamitay!
Explicación:
lo unico q pude resumir