Biografía de Margarito Zuazo
Respuestas a la pregunta
Margarito Zuazo (¿?- 1847) fue miembro del Batallón Mina y murió al defender la bandera mexicana que había enredado a su cuerpo, durante la batalla de Molino del Rey. Siempre se dijo que los niños héroes eran seis y que uno de ellos se arrojó envuelto en la bandera desde lo alto del Castillo de Chapultepec. Pero la realidad es otra. Si bien seis de ellos murieron el 13 de septiembre de 1847 y ninguno se aventó, más de cincuenta cadetes también participaron en la defensa, uno de ellos, Miguel Miramón, cayó herido en la defensa de la patria
A finales de agosto de 1847, las tropas norteamericanas se encontraban próximas a tomar la Ciudad de México. El ejército invasor había ocupado la ciudad de Puebla sin disparar un solo tiro y habían resultado victoriosos en las batallas de Padierna y Churubusco. Las hostilidades habían sido suspendidas con la esperanza de lograr un armisticio.
Ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo, la mañana del 8 de septiembre de 1847, el general Scott ordenó se reanudaran las hostilidades; el objetivo, uno de los lugares estratégicos para llegar al Castillo de Chapultepec: Molino del Rey.
La batalla de Molino del Rey fue una de las más encarnizadas de la guerra con Estados Unidos. Durante las varias horas que duró el combate, las tropas mexicanas lograron rechazar una y otra vez a los invasores.
En el último momento, cuando era necesario que cargaran las tropas de reserva de Santa Anna y la caballería del general Juan Álvarez para consumar la victoria, este último no quiso que otros se llevaran la gloria y se mantuvo con sus hombres observando el combate desde la Hacienda de los Morales. Cuando los norteamericanos se reagruparon y cargaron nuevamente, la posibilidad de la victoria mexicana se había esfumado.
saludos...
""Murió por la Patria""
La mítica escena no deja de ser conmovedora: 13 de septiembre de 1847, Juan Escutia, cadete del Colegio Militar y ""niño héroe"" a los veinte años de edad, toma la enseña tricolor y decide arrojarse desde lo alto del Castillo de Chapultepec antes que verla mancillada por los invasores estadounidenses.
Fue por mucho tiempo, la leyenda romántica más socorrida de la historia oficial. La que nos gustaba escuchar cuando éramos niños. in embargo, la heroica hazaña del pabellón nacional no sucedió en el Castillo sino días antes, el 8 de septiembre, en la sangrienta batalla de Molino del Rey y otro fue su protagonista. Miembro del batallón Mina, el capitán Margarito Zuazo fue de los últimos oficiales en sucumbir ante el furioso embate del enemigo. Sus jefes, el general Antonio de León y el coronel Lucas Balderas habían caído luego de batirse como fieras. El capitán Zuazo correría la misma suerte. ""Era un mocetón arrucado y listo -escribió Guillermo Prieto-; a la hora de los pujidos, él estaba en primera; él era muy hombre; le hirieron de muerte, y a chorros le corría la sangre... viéndose perdido, coge la bandera del batallón Mina matando a los que se echaban sobre ella... la dobla y la acurruca en su seno..."". Con el pabellón en su poder, continuó luchando y tras sortear las balas de fusilería, la metralla de los cañones y las afiladas bayonetas, logró llegar al edificio principal de Molino del Rey. ""Allí se quitó la chaqueta y la camisa -continúa Prieto- y se enredó contra su cuerpo la bandera"". La amenazante cercanía de los norteamericanos no lo amedrentó; cuando la batalla tocó la última llamada, el capitán regresó al combate. Las bayonetas invasoras no tuvieron misericordia de su cuerpo, atravesado una y otra vez, Zuazo logró retirarse moribundo, buscando salvaguardar la bandera que, bajo su uniforme manchado de guerra y sangre, encontraba el calor de la patria en el cuerpo de uno de sus hijos que por ella, entregaba la vida. Hasta la muerte debió reconocer su valor. Del ""héroe desconocido"", el Castillo de Chapultepec guarda la preciada reliquia. Los verdaderos héroes no se encuentran en la historia oficial.