¿Aún podemos revertir los problemas ambientales
que hemos generado con la contaminación?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Si podemos
Explicación:
La evidencia científica es contundente: el calentamiento observado en el planeta es producto de la actividad humana y este tiene y tendrá un enorme impacto sobre el funcionamiento del sistema terrestre. Por ello, se debe propiciar un cambio radical en la forma en que se desarrollan las actividades agrícolas, ganaderas y forestales, y en cómo se genera energía para los procesos industriales. Hay que actuar ahora, con decisiones transformadoras. Este artículo fue publicado en la Revista Universitaria #156, en octubre de 2019.
Chilcas en el bosque nativo
photo_camera La esperanza en la naturaleza: La crisis climática es un problema en la naturaleza y puede ser resuelto por la naturaleza a través de la denominadas Soluciones Basadas en la Naturaleza. Una de estas soluciones es potenciar el rol de los bosques nativos en el secuestro de carbono. Otra alternativa se asocia a cambios en las prácticas silviculturales o a la manera en que se realizan las plantaciones de especies exóticas, transformando las grandes extensiones de monocultivos actuales en paisajes agroforestales heterogéneos con policultivos, donde se disminuya la probabilidad de incendios y su propagación. (Foto: Banco de Fotos Imagen de Chile, Felipe Cantillana)
Nuestro planeta está vivo. Todos sus componentes son esenciales para posibilitar la existencia, tal como la conocemos. Tiene una historia de profundos cambios asociados a las modificaciones que han sufrido los distintos componentes del denominado sistema terrestre: hidrósfera, geósfera, biósfera, atmósfera y criósfera.
La composición de la atmósfera, por ejemplo, ha cambiado repetidas veces a lo largo de sus más de 4.500 millones de años, desde una atmósfera reductora, con hidrógeno, helio, metano, amonio y agua, a una dominada por nitrógeno y oxígeno.
Esta modificación en su composición es, en gran medida, producto de la vida y del surgimiento de grandes innovaciones biológicas como, por ejemplo, la fotosíntesis, que permite capturar la energía solar en compuestos ricos en carbono y transferir esta energía para alimentar a una gran diversidad de organismos y procesos biológicos que sustentan nuestra vida y hacen posible la existencia humana, incluyendo nuestros sistemas sociales y económicos.
Nuestra especie es producto de la evolución del planeta. Somos un fenómeno planetario y estamos insertos en la naturaleza. Este es un hecho de la causa que lleva consigo una serie de consecuencias. Entre otras, que todo aquello que hacemos en la Tierra tiene impactos sobre su funcionamiento y sobre nosotros. Qué más claro que la crisis climática que enfrentamos, que representa la consecuencia de nuestra manera de estar en el mundo.
A partir de la revolución industrial, asociada a la invenciónde las máquinas y procesos que funcionan con combustibles fósiles y, en particular, a su escala planetaria a partir de 1950, se produce lo que se denomina la gran aceleración en nuestra transformación del planeta y, como consecuencia, una profunda transformación en el ciclo del carbono. Este se acumula en forma de CO2 en nuestra atmósfera, junto con otros gases de efecto invernadero, como el óxido nitroso y el metano, y genera un calentamiento global que hasta la fecha se estima en 1 ºC.
Un planeta que se derrite: El hielo en el Mar de Beaufort, frente al Océano Ártico, sufrió fracturas y rupturas significativas a mediados de abril de 2016 y no a fines de mayo, cuando esto suele ocurrir. Los especialistas en hielo de la nasa atribuyen el cambio a temperaturas del aire inusualmente cálidas durante los primeros meses del año y a los fuertes vientos causados por un sistema de alta presión estancado en el área. La imagen de la izquierda es de abril de 2015 y la otra de un año después.
Un planeta que se derrite: El hielo en el Mar de Beaufort, frente al Océano Ártico, sufrió fracturas y rupturas significativas a mediados de abril de 2016 y no a fines de mayo, cuando esto suele ocurrir. Los especialistas en hielo de la nasa atribuyen el cambio a temperaturas del aire inusualmente cálidas durante los primeros meses del año y a los fuertes vientos causados por un sistema de alta presión estancado en el área. La imagen de la izquierda es de abril de 2015 y la otra de un año después. (Foto: US Geologial Survey (USGS), Departamento del Interior de EE.UU./USGS y NASA)
De hecho, las actuales concentraciones de carbono atmosférico son comparables a las experimentadas por nuestro planeta hace 2,5 millones de años. Durante ese tiempo, el Ártico era apreciablemente más cálido, con temperaturas que se estiman sobre los 15 ºC, y el nivel del mar era 20 metros más alto que en el presente. De no revertir esta situación, podemos enfrentar serias consecuencias en nuestro modo de vida.
Respuesta:
No, porque la mayor parte de las personas no quiere modificar sus patrones de consumo, que generan más y más contaminación.
Explicación:
Tal vez a largo plazo podriamos reducir nuestro consumo de grandes empresas, para reducir el cambio climatico, pero ahora esto ya esta muy avanzado y contaminado