aportaciones culturales de Portugal
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
a.- Azulejos
Son una presencia constante en la arquitectura portuguesa. Ningún otro país reviste tantos exteriores de casas, iglesias, palacios, etc. Son de origen musulmán, y empezaron a producirse en Portugal a finales del siglo XV. Su apogeo se remonta al siglo XVIII, con el azulejo azul y blanco.
En el Museo Nacional del Azulejo de Lisboa se ilustra su historia, aunque basta viajar en tren por el país, visitar sus ciudades o utilizar el metro de la capital para poder apreciar hermosos ejemplos de este arte decorativo tan característico de Portugal.
b.- Literatura
Portugal es un reconocido país de poetas. Nuestra poesía se inició al mismo tiempo que la nación, con la poesía trovadoresca, pero escaló a lo más alto de la epopeya durante el Renacimiento, con la publicación de Los lusíadas, obra en la que Luís de Camões (1524-1580) canta las hazañas de los portugueses en sus descubrimientos. A principios del siglo XX adquirió tonos más universalistas con la obra de Fernando Pessoa (1888-1935), el poeta portugués más traducido. Sin embargo, fue la prosa de José Saramago (1922-2013) la que conquistó el Premio Nobel en 1998.
c.- Estilo manuelino
Mientras en Europa se construían catedrales góticas, en Portugal se introducían en la arquitectura y la escultura elementos de inspiración marítima y símbolos del poder real, como la esfera armilar, en lo que llegaría a ser conocido como estilo manuelino. Llamado así por su nacimiento durante el reinado de Manuel I (1495-1521), la gran época de los descubrimientos portugueses, este estilo tiene como mayores ejemplos el Monasterio de los Jerónimos, la Torre de Belén, el Monasterio de Batalha y el Convento de Cristo, pero se pueden encontrar a lo largo de todo el país construcciones y decoraciones de sabor manuelino en iglesias, palacios, pelourinhos (picotas) e incluso en la arquitectura civil.