Ante la problemática que estamos viviendo que podríamos proponer para combatir estás deficiencias????
Respuestas a la pregunta
El coronavirus ha desnudado las desigualdades del capitalismo y ha mostrado más claramente el sufrimiento de los países de América Latina. Esta crisis puede abrir el camino hacia una redefinición del orden mundial que establezca criterios de justicia, igualdad y transformación social y ecológica. Para eso, habrá que dar una dura batalla.
Fortalecer la democracia. En la actualidad, muchos países se encuentran en circunstancias excepcionales y requieren medidas de ese mismo tipo. Los Estados del mundo parecen estar respondiendo al llamado del secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, y están declarando la «guerra al coronavirus». Sin embargo, muchas medidas, como las operaciones militares, los toques de queda y las prohibiciones de reunión, traen consigo recuerdos desagradables de tiempos que creíamos que habían pasado. Los Estados de América Latina saben muy bien cómo se manejan las guerras, especialmente las domésticas. La coronacrisis legitima la concentración del poder en el Ejecutivo y vuelve seductoras las medidas autoritarias y represivas. ¿Cuánto se socava la democracia en esta lucha contra el coronavirus? Una acción decisiva es tan indispensable como mantener la máxima transparencia en la información sobre las medidas y su aplicación. Los derechos democráticos no deben ser restringidos en tiempos de crisis. Se debe prestar especial atención a la participación social y política y a las minorías.
Desmantelando la carrera armamentista. La lucha contra el virus como «enemigo invisible» ha estado, con demasiada frecuencia, plagada de metáforas bélicas por parte de los gobernantes de Estados Unidos, Europa, China e incluso por los líderes de América Latina. Pero el coronavirus no conoce fronteras nacionales y no puede ser derribado con disparos. Quien quiera derrotarlo debe ajustar sus estrategias: un primer paso sería la suspensión inmediata de todas las acciones bélicas, seguida del cese de todas las acciones militares amenazantes, como las de Estados Unidos hacia Venezuela. Otra medida debería reorientar de forma inmediata los fondos de los gastos militares hacia la financiación de la salud pública mundial. Actualmente, los gastos para armamentos ascienden a 1,8 billones de dólares. Con fondos de esta magnitud no solo se logrará combatir el coronavirus, sino también establecer una atención médica básica en muchos países del Sur global. Esta propuesta tiene implicancias concretas para América Latina, en tanto el gasto militar de la región en 2018 aumentó en 3% en comparación con el año anterior. Con un gasto de alrededor de 1,5% del PIB, Brasil es actualmente el país que más está invirtiendo en armamento. Quien decide sobre los armamentos es exclusivamente el Estado. Europa y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) deberían ser los abanderados y frenar la actual carrera armamentista.
Espero ayudarte,coronita plis✨