Análisis de los principios del bien común
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
bien es cierto bien común puede
entenderse como un concepto
compuesto por dos términos
suficientemente acotados en los diccio-
narios, su significación trasciende a la
sumatoria de éstos. En forma análoga,
viene a representar un perfecto ejemplo
de la teoría sistémica donde el total es
mayor que la sola suma de sus partes.
He estimado pertinente entonces,
para fines de este ensayo, iniciar mi
análisis del bien común, a partir de la
interpretación del concepto del bien,
para precisar, a continuación, lo que
constituye su calificación de común, y
su internalización por la sociedad como
concepto de “trascendencia mayor”.
A continuación proseguiré con un
análisis de las interpretaciones contra-
dictorias que se derivan de la utilización
de este concepto donde, según las ideo-
logías predominantes, el bien común
tiene interpretaciones diferentes, para
finalizar con algunas conclusiones que
nos permitan destacar las dificultades
que tiene este constructo para erigirse
como un principio rector que oriente
adecuadamente tanto al hombre indi-
vidual como a la sociedad entera en la
búsqueda de su perfección.
Concepto de bien.
De acuerdo a su concepción filosó-
fica, el bien representa el valor supremo
de la moral; pero desde el punto de vista
económico, corresponde a cualquiera de
las cosas susceptibles de satisfacer nece-
sidades humanas. Aristóteles llamaba
bienes a los medios que sirven para la
vida y el bienestar de los hombres.1
Es
más, reconoce que en el mundo, los
hombres libres no están sometidos a
hacer esto o aquello según la ocasión,
sino que todas sus funciones, o la mayor
parte, están reguladas, a diferencia de
los esclavos y las bestias de carga, donde
su actuar depende de las circunstancias.2
Este es, en efecto, el principio que consti-
tuye la naturaleza de cada uno, donde el
actuar de los hombres libres se orienta a
la armonía del conjunto.
Empédocles considera que el bien
es la amistad; Anaxágoras reconoce el
bien como el principio motor y otros
filósofos de la antigüedad utilizan el bien
oponiéndolo al mal, en una correlación
entre lo igual y lo desigual, como inter-
pretando que todas las cosas provienen
de los contrarios. No obstante, en dicha
época se apreciaba que todas las cosas
son objeto de un orden compuesto de
cierta manera, donde todas ellas está en mutua relación y orde-
nadas hacia un fin, que es
el bien por excelencia.