Alguien me podría ayudar?, necesito escribir una "historia" la cual contenga un conflicto, pero la verdad no tengo imaginación, alguna idea? (necesito varias pls) lo necesito para el viernes, pero mañana debo presentar un avance de lo contrario me descontarán puntos ☹️
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Pues podrías escribir que había una ves un reino había tres príncipes que se destinguian por su forma de ser uno era muy bueno otro más bondadoso y otro era más mal comportado y que un día el rey su padre los puso a prueba que les iba a dar unas monedas de oro y el que le tejera la mitad de la cantidad que le dio a cada uno y así le puedes seguir haciendo
Papá es un alien
Hace rato que sospechaba, pero desde hoy no tengo dudas. Todo empezó con Zeus, el perrito que alguien abandonó en la puerta de mi casa. Le dije: “Zeus, te quedas esta noche en el sótano, tienes comida y cobijas, vas a estar bien, no me sigas, en mi habitación te pueden descubrir”. Me miró y se quedó callado hasta que cerré la puerta. Creí que sería fácil esconderlo, pero llegó papá del trabajo y Zeus empezó a aullar porque los perros pueden ver cosas que nosotros no, como fantasmas y extraterrestres.
Bajé las escaleras, pero no alcancé a llegar al sótano antes que papá. Ordenó con voz de villano: “¡En menos de 24 horas se deshacen del cachorro!”. Recordé una película en la que gritaban: “¡El meteorito es tan poderoso que va a deshacer el planeta en menos de 24 horas!”. Papá es el meteorito.
Yo lo traje a la casa, ella no tiene la culpa. Pero papá siguió discutiendo con mamá. Digo cosas, pero con mi voz de hormiga nadie me escucha. Zeus ladraba y ladraba. Papá le dio un puñetazo a la ventana de la cocina, crash. De su mano empezó a salir sangre verde y mamá tuvo que llevarlo al hospital.
Ella quería que yo me quedara con Zeus, pero cuando regresó a la casa me dio una mala noticia: “¡Vamos a buscarle una casa en donde sí lo quieran!”. Yo no digo nada para que no haya más regaños, ni vidrios en el piso, ni un perrito asustado bajo el sofá.
Antes de que se vaya Zeus, le digo que cuando sea grande se escape y venga a rescatarme. Los perros recuerdan el camino a casa. Me encierro en mi habitación para no salir nunca. Ni siquiera cuando me duela la barriga de hambre.