Acciones para promover la solidaridad con nuestros hermanos que sufren por las diversas dificultades que pasan en su vida
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
tiempo en familia es una oportunidad importante para compartir y crear buenos recuerdos juntos. Es por esto que en Cecodap queremos conversar sobre la solidaridad en el ambiente familiar, definiendo principalmente lo que es la solidaridad y mostrando la importancia de aplicarla constantemente en nuestro entorno.
La solidaridad se puede entender como aquel valor del ser humano que se enfoca en ayudar a los demás sin la intención de recibir algo a cambio. Surge a partir de la empatía hacia los otros, lo que produce una inclinación de ayudar a los demás pensando en que nos pudiera ocurrir a nosotros esa situación difícil y nos gustaría tener algún tipo de apoyo.
Este concepto se puede aplicar diariamente en muchos ámbitos de la vida: cuando ayudamos a una señora a cruzar la calle, al tratar de consolar a un niño llorando, ayudar a un amigo cuando tiene una emergencia, etc. Uno de los ámbitos donde es más necesario este valor es en la familia, debido a que es nuestro ambiente más cercano y con quienes, por lo general, pasamos la mayor cantidad de tiempo.
En este sentido, si nos enfocamos en ayudar a nuestros familiares cuando lo necesiten, estaríamos contribuyendo a fortalecer los vínculos familiares que tengamos con ellos, contribuyendo a que los malos momentos que generaron sentimientos negativos se superen progresivamente.
Para comprobar esto, solo hace falta imaginarnos el escenario donde estemos molestos con una persona (pareja, hermano, hijo, etc.) y ésta haga alguna buena acción hacia nosotros. A pesar que la molestia no desaparece por completo al instante, sí empezaríamos a cambiar los sentimientos negativos por otros positivos.
Sin embargo, para iniciar un cambio en el entorno es clave mantener una motivación y una visión clara de lo que se busca lograr. Lo complejo puede estar en dar el primer paso que inicie esta nueva dinámica. En este sentido es importante tomar en cuenta los beneficios que la solidaridad en la familia pueda traer:
Mejorar las relaciones interpersonales
Aumentar la confianza entre sus miembros
Conseguir un apoyo importante en momentos difíciles
Superación progresiva de los malos momentos
Si tomamos en cuenta estos elementos los podemos tomar como una especie de motivación para iniciar ese cambio necesario en el hogar e introducir este valor tan importante.
Ejemplo para los niños
Los niños son vulnerables a verse afectados por los cambios o formas de relación de los adultos significativos de su entorno. Por eso encontramos en dinámicas de violencia familiar niños que se comportan de forma agresiva o que se inhiben frente a dinámicas sociales.
Pero si logramos generar un entorno solidario dentro de la familia (siendo este el ambiente más próximo) estaremos brindando un ejemplo a los niños sobre cómo se debe actuar hacia los demás y éstos aprenderán una forma sana y amigable de relacionarse con sus compañeros o familiares.
Algo clave para instaurar este hábito de ser solidario con otros es que estas acciones solidarias sean constantes, ya que mientras mayor tiempo observen estos comportamientos en los adultos, mayor será el aprendizaje y empezarán a imitar estas conductas con mayor facilidad.