7 propuestas para evitar el bulling
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
1. Sensibilizar, concienciar y dotar de herramientas a la institución escolar y al cuerpo docente
Es necesario sensibilizar a las propias instituciones educativas y a los docentes, que en muchos casos carecen de suficientes conocimientos sobre el acoso escolar para poder detectarlo. Además aunque afortunadamente cada vez ocurre menos, en algunos casos se ignoran activamente las situaciones de acoso permitiendo su ocurrencia sin que tenga repercusiones (con frase como “son cosas de niños”).
Hacer reuniones formativas para los profesionales del centro, enseñarles a detectar casos e indicios de abuso y la importancia de actuar contra ello y elaborar o seguir protocolos al respecto es fundamental
2. Involucrar al grupo clase
El grupo clase es el contexto donde ocurren los actos de agresión, existiendo gran número de testigos del acto que presencian o incluso participan en la agresión. De hecho, a menudo el agresor repite el acoso ya que ello le proporciona aceptación o atención por
parte del resto de sus iguales. Es por ello que es extremadamente importante trabajar con el conjunto del grupo clase para prevenir el bullying, haciendo que la reacción hacia el acoso sea negativa y no prosperen actitudes violentas e intolerantes.
3. No hacer del bullying un tabú
Es frecuente que se tenga al acoso escolar como un fenómeno desagradable del que no se suele hablar abiertamente y que se tiende a ocultar, pudiendo esto hacer que los propios alumnos no sepan reconocerlo. Para combatir este silencio es necesario hablar abiertamente de lo que supone el bullying organizando clases donde se hable respecto a éste, sus consecuencias tanto a corto como largo plazo y se planteen posibles medidas para evitarlo.
4. Educación emocional y educación en valores
Una de las formas más directas de prevenir actos de acoso escolar es mediante la aplicación de planes de acción tutorial en que tengan cabida elementos centrados en la educación emocional y en valores de los alumnos.
Trabajar valores como la tolerancia o el respeto es fundamental, así como enseñar a gestionar y expresar las propias emociones (cosa que a su vez facilita la adquisición de la empatía). Un ejemplo de actividad que puede favorecerlo es mediante la representación teatral de diferentes situaciones, la visualización de películas que traten el tema en toda su crudeza o la discusión en torno a momentos o temas importantes para cada menor.
5. Realización de actividades cooperativas
Para despertar la empatía del grupo y favorecer que no florezca el acoso es de gran utilidad llevar a cabo actividades grupales en las que el conjunto de la clase tenga que trabajar junto, estableciendo relaciones entre ellos para lograr un objetivo común. La realización de juegos grupales o de proyectos en que se tengan que coordinar todos los componentes del grupo es un buen ejemplo de ello.
6. Evitar hacer mediación entre acosado y acosador
La idea de la mediación es una práctica de gran utilidad y muy positiva para hacer frente a conflictos mantenidos entre dos partes consideradas iguales entre sí. Sin embargo está contraindicada en casos de acoso escolar, ya que en esta situación existe una relación desigual entre agredido y agresor que no permitirá un correcto funcionamiento de la práctica.
7. Trabajo con la parte agredida
El sujeto agredido debe ser atendido de tal forma que no se sienta abandonado sino apoyado y acompañado, haciéndole ver que se están haciendo cosas para solucionar su situación. Es imprescindible que exprese sus emociones, sentimientos, pensamientos y dudas sin ponerlos en tela de juicio, mediante métodos como por ejemplo la silla vacía o juegos de role-playing.