6. ¿Por qué sus creyentes le dicen "ladrón
de los corrales" a San Martín de Reque?
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
San Martín de Reque es el único santo del panteón católico cuya imagen no tiene ninguna de las características tan comunes entre sus semejantes. Sus facciones no son afiladas, finas o afeminadas. Sus rasgos fisonómicos no tienen nada de bellos, se distinguen por su aspecto de dureza, por su color
rojizo y por sus aires de valentía.
Es San Martín de Reque, el Santo patrón de los agricultores de este
pueblo quien preside los sembríos, apadrina las labranzas y defiende las cosechas.
La Iglesia le ha dado por distintivo un libro, pero la tradición sostiene que a veces abandona la labor para dedicarse a otras de mayor empuje y más resolución. Esa misma tradición lo ha visto arrojar desdeñosamente, el libro que sostiene en la mano derecha y empuñar, resueltamente, un revólver con el que sale a los campos, montado en brioso zaino para obligar al cielo que produzca lluvias. El origen de esta leyenda es incierto, pero se la conoce así.
Cierto año fue tal la escasez de agua que no sólo se perdieron las cementeras y el ganado murió de sed, sino que la población tuvo que emigrar en busca
de trabajo y sustento a lugares lejanos, lo que trajo consigo el abandono a su culto y que decreciera la atención que le venía dispensando creyentes y devotos a San Martín de Reque. Fue entonces que el santo rojo, guapo y luchador se tornó irascible, arrojó el libro de la devoción, empuñó el revólver de combate
y armado amenazó al cielo; ante tal valerosa actitud se desató una copiosa lluvia que devolvió la fertilidad
a los campos y riqueza a sus habitantes.
Desde entonces no ha faltado el agua en Reque, sus tierras gozan de la fama de ser siempre productivas y cuando esta escasea, los agricultores solicitan la protección de San Martín quien atento al llamado de sus creyentes, se prepara para amenazar al cielo en demanda de la lluvia promisora.
Es tal la creencia popular que se tiene sobre la valentía de este santo
que las extrañas leyendas dicen haberlo visto caminar apresurado y resuelto por las calles de Reque, especialmente por la calle del Tambo, con un par de patos en una mano y en la otra lleva el revólver
de “Monte y Pelo”, precisamente en la noche de vísperas de su fiesta que es
el 11 de noviembre. Esta forma de verlo explica de donde viene el trato curioso de sus creyentes, cuando en la iglesia le cantan a su efigie el siguiente verso
en el que expresan respeto, y temor.
Padre mío, San Martín,
Patrón de los alfalfares,
Dueño de los caracuchos
Y ladrón de los corrales.
Explicación: