5 ejemplos de mezclas homogénea
Respuestas a la pregunta
El aire.
La masa de gases que conocemos como aire, atraída a la superficie terrestre por la gravedad, está compuesta por diversos gases: nitrógeno, argón, oxígeno y dióxido de carbono, entre otros, pero no podemos distinguirlos a simple vista.
Café con azúcar.
Al disolver una cucharada de azúcar en el café, dejamos de apreciar el color blanco de este ingrediente, a pesar de que podamos sentir su sabor al tomar un sorbo. Sin embargo, no ha dejado de ser lo que es: una mezcla de azúcar y café.
Agua con sal.
El agua del mar está repleta de sales y otros componentes disueltos en su inmensidad y, aunque podamos sentir lo salado en los labios o la piel luego de darnos un baño y podamos incluso recuperar la sal si dejamos secar un poco de agua marina, no podemos distinguir a simple vista la sal del agua.
Leche chocolatada.
Esta bebida tan típica de la infancia consiste en la mezcla homogénea de un vaso de leche y un puñado de chocolate en polvo. El resultado es leche color chocolate, cuyos componentes son inseparables a simple vista.
El acero.
La formación del acero implica una aleación de hierro, su metal base, con otros componentes metálicos o no metálicos como carbono, níquel o cobre, dependiendo del tipo de acero que se busque. El resultado es un metal conjunto en el que no se pueden distinguir los componentes y que combina sus propiedades físicas. Ocurre lo mismo con otras aleaciones metálicas como el bronce o el oro blanco.
Agua y alcohol.
La preparación de muchos tragos o cócteles pasa por mezclar agua y algún alcohol destilado, lo que permite obtener una mezcla líquida homogénea (no puede apreciarse cuánto hay de cada componente a simple vista). Si se lo prueba, no obstante, se podrá sentir el sabor de ambos, y dependiendo de la concentración de alcohol, tendremos un trago más o menos fuerte.