5 actitude en la familia
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
La familia transmite valores como el amor, el respeto, la tolerancia, la responsabilidad o la obediencia. Si estos valores no se han aprendido en el seno familiar, será más complicado que los apliquen en su vida adulta.
Explicación:
no sé si t refieres a eso, espero t ayude :D
Respuesta:
1. La falta de atención
Los hijos necesitan sentir el amor y el cariño constante de sus padres. Esa atención la miden por el tiempo que pueden pasar por sus padres. Si no pasamos tiempo con ellos o solo el llamado “tiempo de calidad” nuestros hijos se sentirán desatendidos. Necesitan que compartamos tiempo todos los días con ellos. También que escuchemos sus “pequeños grandes problemas” y recordemos sus cumpleaños, sus competiciones deportivas y nuestras promesas. La falta de atención la sienten nuestros hijos como una especie de abandono. Además, pueden interpretarlo como que no son importantes para nosotros.
2. La relación de pareja de nuestros padres
La relación de los padres suele convertirse en el patrón o en el ejemplo que adquieren los niños de las relaciones de pareja. Aunque no sea de forma consciente, los adultos suelen repetir lo que han visto en su familia. Por eso es fundamental que en la relación de los padres los hijos observen respeto, complicidad, amor y trabajo en equipo. Los conflictos mal resueltos entre los padres pueden influir en sus futuras relaciones de pareja y en su manera de afrontar los problemas.
3. La protección de los padres
El miedo que sintieron aquel día de tormenta en verano o el miedo a la oscuridad por la noche no se suelen olvidar por los niños. Los hijos confían siempre en los padres para lograr una sensación de seguridad. Cuando encima los padres son los que causan el miedo en los hijos se sienten desprotegidos.
4. La violencia verbal o física
Los conflictos durante la vida de nuestros hijos van a ser continuos. Gestionar estos problemas de manera correcta es importante para establecer una buena comunicación con nuestro hijo. La violencia verbal o física nunca se debe establecer para intimidar a los niños. Solo conseguirá alejarlos de nosotros y que nos tengan miedo. Les genera angustia, rencor y falta de autoestima. Tenemos que intentar ponernos en su lugar y comprender lo que le ha llevado a una mala conducta. Además, debemos sentarnos a hablar con ellos con calma y que sean capaces de verbalizar lo que han hecho mal. Una vez que comprendan lo que han hecho mal, será más fácil que no lo vuelvan a repetir.
5. Una familia unida
Los adultos que han disfrutado de una familia unida durante la infancia nunca lo olvidan. Cuando los padres ponen a la familia por encima de todo lo demás, siempre se recuerdan los valores que les han enseñado. Las comidas familiares, los juegos con los hermanos o el apoyo incondicional se recuerdan toda la vida. Incluso sueñan con poder formar una familia en el futuro. La familia transmite valores como el amor, el respeto, la tolerancia, la responsabilidad o la obediencia. Si estos valores no se han aprendido en el seno familiar, será más complicado que los apliquen en su vida adulta.
Explicación: