4. De acuerdo a su estructura los huesos se clasifican en
a. Largos y compactos
b. Planos y redondos
6. Esponjosos y compactos
d. Largos y cortos
Respuestas a la pregunta
Respuesta:
Explicación: La clasificación de los huesos se basa en su forma y estructura. Siendo el hueso un órgano fuerte, duro y firme de los vertebrados que les permite moverse y sostenerse.
El tejido óseo se compone de tejido duro. Es un tipo de tejido conectivo especializado formado por osteocitos (células). Y diversos componentes extracelulares calcificados.
Hay un total de 206 huesos en el cuerpo de los humanos. 126 son huesos apendiculares y 80 huesos son axiales.
Estos están cubiertos por tejidos conectivos cartilaginosos y tejidos conectivos fibrosos. Además de nervios y vasos para inervar e irrigar su estructura.
Los huesos químicamente están constituidos por 30% de materia orgánica, 25% de agua y 45 % de sales de calcio (minerales).
Están cubiertos por la epífisis que es el extremo de los huesos y el periostio que contiene los vasos y nervios sanguíneos. Seguida de la médula ósea que se encarga de producir las células sanguíneas.
Los tejidos blandos están constituidos por los nervios, médula ósea y vasos que intervienen en la circulación sanguínea interna. Por la grasa o tejido adiposo y los tejidos conectivos mieloides.
Los huesos poseen la capacidad de reconstitución y regeneración. Permiten el movimiento del cuerpo.
El conjunto de huesos organizados conforma el esqueleto. Cada hueso cumple una función en particular. Pero no trabajan por sí solos, sino en combinación con las articulaciones.
Estos se encargan de darle soporte y forma al cuerpo. Permiten la locomoción y sirven para el almacenamiento de los minerales como fósforo y calcio.
Existen 2 tipos de huesos. El esponjoso o trabecular que forma parte de la columna vertebral. Y el compacto o cortical que conforma la parte dura y externa de los huesos.
lasificación de los huesos de acuerdo a estructura y forma
Los huesos se clasifican de acuerdo a su estructura en:
Hueso compacto: es la parte del hueso que está formada por las células óseas rígidas.
Hueso esponjoso: es el constituido por trabéculas o mallas óseas de tamaño pequeño entre 0,1 y 0,5 milímetros.
De acuerdo a su forma se clasifican en:
Huesos cortos: son huesos en forma de cubo o irregular. Sus medidas de anchura y longitud son casi iguales. Aguantan grandes presiones y se articulan con los huesos periféricos.
Están ubicados en los sitios que tienen movimientos y limitada extensión. Como en las muñecas, tobillos, pies y manos.
Huesos largos: son huesos de forma cilíndrica y son más largos que anchos. Conformados por la diáfisis (zona cilíndrica) y la epífisis (son los extremos).
El tejido esponjoso está localizado a nivel de la epífisis. Y el tejido compacto en la diáfisis.
Poseen una curvatura que les aporta resistencia (un hueso curvo que permite la distribución uniforme de la carga). Están localizados en los sitios donde se efectúan movimientos intensos. En las extremidades inferiores y superiores.
Huesos sesamoideos: son huesos redondos y pequeños que se ubican cerca de las articulaciones.
En la parte interna de los tendones donde hay tensión, esfuerzo físico o fricción (palmas de las manos y plantas del pie).
Estos se encargan de proteger los tendones de los desgastes y desgarros. Y aumentan el funcionamiento de la palanca de los músculos.
Huesos planos: son huesos curvos y delgados que sostienen los músculos y protegen a los órganos o partes blandas del organismo.
Tienen poco espesor y cara lisa en contraposición a sus bordes que utilizan para articularse con otras estructuras. Son huesos planos la pelvis, esternón, costillas, omóplatos y el cráneo.
Huesos irregulares: son estructuras óseas de forma irregular. Se ubican en la parte de los huesos donde no se destaca ninguna dimensión.
Sobre las otras y no se llega a ubicar ninguna del resto de las clasificaciones. Como mandíbulas, huesillos del oído y vértebras.
Enfermedades más comunes relacionadas con los huesos
Los huesos son tejidos vivos que están en constante regeneración a través de las etapas de la vida. Estos le dan forma al cuerpo y lo ayudan a moverse.
Durante el periodo de la infancia y el periodo de la adolescencia el cuerpo va agregando huesos nuevos y va eliminando los viejos.
Para fortalecer los huesos durante la juventud y prevenir la pérdida ósea en la tercera edad se debe ingerir suficiente vitamina D y calcio. Además de hacer ejercicios y evitar el consumo del alcohol y los cigarrillos.
Entre estas enfermedades destacan:
Osteomalacia: es un tipo de enfermedad que reblandece los huesos conocida como huesos blandos. Afectando la mineralización de los huesos.
Incrementa los riesgos de fracturas en piernas, caderas y pelvis. Se produce por déficit de vitamina D la cual le facilita al cuerpo absorber el calcio.